La Policía Local de Moaña denunció ayer, a última hora de la tarde, a un conductor de 43 años, vecino de Domaio, por conducir un turismo careciendo de los permisos vigentes. El carné le había sido retirado por sentencia judicial. El pasado 2 de abril agentes municipales lo pararon en un control de alcoholemia y había arrojado una tasa de 1,16 miligramos por litro en aire espirado en el primer control y de 1,12 en el segundo, por lo que fue sometido a un juicio rápido por un delito contra la seguridad vial.
Ahora se le imputa un segundo ilícito penal de este tipo. En abril el juez le impuso una pena de prisión de tres a seis meses o multa de 12 a 24 meses, con posibilidad de sustituirlos por trabajos en beneficio de la comunidad entre 31 y 90 días. Además se le retiró el carné, a pesar de lo cual ayer volvía a conducir.
La Policía Local de Moaña lleva meses llevando a cabo controles de alcohol al volante, durante los fines de semana, en las calles municipales. En el último fin de semana, sin ir más lejos, se detectaron dos positivos. Uno de ellos no llegó a una tasa de 0,60 por lo que se saldó con una denuncia administrativa, pero el otro cuadruplicó la tasa permitida y también se le acusó un delito contra la seguridad vial, quedando pendiente de acudir a un juicio rápido.
Eso se suma a las campañas periódicas de control de velocidad con ayuda del radar móvil que cede la Dirección General de Tráfico (DGT). La intención es repetir estos controles de velocidad en este mismo mes de junio.
