El mes de febrero fue trágico en O Morrazo en lo que al mercado laboral se refiere. La creación de puestos de trabajo durante las navidades resultó ser un espejismo y a lo largo del último mes se destruyeron 98 empleos. Sin duda, la economía se vio afectada por las restricciones impuestas a distintos sectores como la hostelería para atajar la tercera ola de la pandemia de COVID-19. En enero, con unas navidades más relajadas, se había contratado a 178 personas.
La magnitud de la escalada del paro queda patente al observar lo ocurrido en febrero de 2020, antes del comienzo de los confinamientos por la pandemia. Entonces se habían creado 92 puestos de trabajo, casi la misma cifra destruida este año en el mismo periodo de tiempo. Es más, el de este año es el peor mes de febrero en casi una década, con un incremento del paro que no se recordaba en esta época desde la pasada crisis financiera.
Peores son todavía los datos si se tiene en cuenta la evolución interanual. Y es que desde el comienzo de la pandemia O Morrazo ha perdido nada menos que 803 empleos. A esto hay que añadir que no se incluyen en esta cifra todos los trabajadores que están inmersos en un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) y cuyos puestos están en riesgo.
Desde el pasado viernes las autoridades sanitarias iniciaron la desescalada de la tercera ola, permitiendo la reapertura de la hostelería, aunque con severas restricciones de aforos y horarios. Esta medida debería incidir de forma positiva en la evolución del mercado laboral en el mes de marzo. Este mes acabará, además, con el comienzo de la Semana Santa, lo que debería suponer un tirón para la contratación, si no se endurecen las restricciones. Sobre todo teniendo en cuenta la alta dependencia que la economía morracense tiene del sector servicios.
Solo Marín vio reducida su cola del paro en 17 trabajadores. Cangas es el peor parado, pues perdió 60 contratos de trabajo a lo largo del último mes. Bueu tiene a 31 personas más anotadas en la Oficina de Emprego y en Moaña el paro creció en 24 trabajadores.
En cifras globales, la comarca vuelve a superar la cifra simbólica de los 6.500 parados, que había conseguido bajar en enero. En total hay 6.597 vecinos de la comarca que buscan un empleo en estos momentos.
En números totales la peor situación la tiene Cangas, que acumula ya a 2.222 trabajadores en la cola del paro. Le sigue Marín con 1.781 y, muy cerca, Moaña con 1.691 vecinos desempleados. Bueu, finalmente, sufre en estos momentos el paro de 879 vecinos.
Por sectores, en el mes de febrero solo crearon empleo la pesca y la construcción, con 25 y 13 contratos más respectivamente. Por contra, la industria perdió a 25 trabajadores y el sector servicios inició marzo con 115 empleados menos que hace un mes.
Con respecto a antes de la pandemia, no hay ningún ramo de la economía de O Morrazo que se libre de los números rojos con excepción de la construcción, que se mantiene con 405 parados. Pero, sobre todo, es en los servicios en donde está el grueso de la destrucción de empleo, con la friolera de 665 parados más en un año y sin contar los Ertes.
Peor comportamiento
La pesca y agricultura perdieron 33 puestos de trabajo desde el inicio de la crisis sanitaria y de las medidas adoptadas por el Gobierno para hacerle frente. Peor le fue todavía a la industria, con 99 trabajadores menos en plantilla que hace un año, lo que supone toda una tragedia para este sector.
La evolución del paro en O Morrazo a lo largo del mes de febrero contrasta con lo ocurrido en el conjunto de Galicia, pues la comunidad fue una de las tres únicas con creación de empleo a lo largo del último mes, aunque el mercado laboral solo creció un 0,41% en toda la comunidad autónoma.
Desde el inicio de la crisis sanitaria, Galicia cuenta con un descenso del paro de 6.401 trabajadores, con un comportamiento mucho mejor que en el conjunto de España, pues el país supera los 4 millones de desempleados por primera vez desde que hace cinco años se empezaran a notar los efectos de la salida de la crisis.
La crisis afecta por igual a hombres y a mujeres
La crisis económica desatada hace un año como consecuencia de la pandemia de COVID-19, está afectando en O Morrazo a hombres y a mujeres casi a partes iguales. Desde febrero de 2020, perdieron su puesto de trabajo un total de 409 varones por 394 mujeres que sufrieron la misma situación. Eso sí, en cifras globales todavía hay un millar de mujeres más en paro. Así, la Oficina de Emprego cuenta con 3.799 vecinas de la comarca inscritas por 2.798 varones. Analizando solo lo ocurrido en el mes de febrero de este 2021, la tendencia es desfavorable para las mujeres, con 71 trabajadoras menos con un contrato laboral en solo un mes. Durante este mismo periodo fueron 27 los varones que perdieron su puesto de trabajo. El próximo lunes, 8 de marzo, está convocada una huelga laboral de mujeres. Desde el sindicato CIG alegan, como razones para la huelga, que las mujeres “no fuimos objeto de ninguna política específica destinada a proteger nuestra salud” durante la pandemia. Aseguran también, desde la central sindical nacionalista, que “no se recompensó el sobreesfuerzo de las mujeres con una revalorización social y económica de nuestro trabajo”.
Paro juvenil
Por edades, O Morrazo cuenta con 263 parados menores de 25 años. Esta cifra entre los trabajadores jóvenes creció en 20 parados el último mes y en 23 a lo largo del último año.
El grueso de la crisis se lo están llevando los trabajadores que superan esa edad, con 780 parados más desde el inicio de la pandemia y 78 puestos de trabajo perdidos el pasado mes de febrero.
