Participantes en la carrera para niños. | // FDV

Integrantes de la organización, el Bueu Running Team. | // S. ÁLVAREZ

Uno de los equipos participantes en el photocall. | // FDV

Más de doscientos corredores entre adultos y niños, otros tantos kilos de comida entregados a Cáritas y veinte días de competición que ayer tuvieron el broche final con su última jornada. Ese es el balance de la prueba “Corre por un Nadal solidario”, una iniciativa impulsada por el grupo de deportistas agrupado bajo el nombre Bueu Running Team y que con imaginación ha recuperado la disciplina atlética en el municipio de O Morrazo. El planteamiento era tan sencillo como novedoso. Se formaban equipos de tres corredores y para evitar las aglomeraciones de cualquier prueba de este tipo se podía elegir el día y la hora a la que poder competir, con el requisito de registrar los tiempos en una aplicación. Es más, para garantizar la mayor participación posible se establecieron hasta cuatro circuitos de 1,5 kilómetros, 5, 10 y 15 kilómetros.

La parte solidaria estaba garantizada con el kilo de comida requerido a modo de inscripción y la colaboración con el comercio local también, ya que los corredores debían elegir un establecimiento comercial buenense para correr bajo sus colores.

La acogida de esta especie de contrarreloj por equipos ha superado por completo las expectativas iniciales. La participación ha sido de 52 equipos con 156 un total de corredores inscritos. “No lo esperábamos, pero la gente vio que todo estaba bien planteado, que era seguro, y se fue animando. Hay muchos atletas que participaban habitualmente en carreras y se generó un efecto llamada”, asegura Santi Barros, uno de los organizadores del evento, que añade que “la gente quería salir a correr y esto era una buena excusa para hacerlo”. Prueba de ello es que varios de los equipos optaron por hacer más de un recorrido o incluso los cuatro. “Ha habido corredores que también han formado varios equipos para correr más veces”, señala Barros.

El éxito entre los adultos fue tal que los organizadores se animaron a realizar una jornada exclusiva para los más pequeños, denominada “Bye Bye 2020”, con 29 equipos formado cada uno de ellos por dos niños y un adulto. La carrera estuvo amenizada por la presencia de elfos en puntos determinados para darles caramelos, hacerles fotografías, hacerlos reír o acompañarlos en un sprint hacia la meta. “Para ellos fue un gran día porque tampoco han tenido muchas actividades en estas fechas”, apunta Barros.

La organización ha quedado plenamente satisfecha por la experiencia. “El factor diferencial, lo que hace especial esta carrera es el hecho de la facilidad para elegir horario y circuito”, apuntan. Además, el hecho de no competir simultáneamente con otros corredores no disminuye los piques entre ellos. “La gente estaba pendiente de los tiempos de los demás para intentar mejorar en el ranking”, afirma. Ahora, tras finalizar los organizadores realizarán un sorteo de regalos cedidos por los establecimientos comerciales colaboradores. Será el día de Reyes y retransmitido a través del facebook de la prueba.