El personal de la concesionaria del servicio de limpieza viaria de Moaña, Urbaser, lleva toda la semana desinfectando con líquido todos los puntos de mayor concentración de ciudadanos durante esta alerta sanitaria. A primera hora de la mañana, antes de que los negocios abran sus puertas, chorrea las fachadas y las aceras del entorno de los supermercados, las farmacias, los bancos con cajeros automáticos y de los centros de salud, con el objetivo de reducir el riesgo de contagio de Covid-19 entre los vecinos del municipio.

La alcaldesa, Leticia Santos, esgrimió esta limpieza ayer para salir al paso de las críticas por parte del concejal del PP, Víctor Carballal, quien aseguró que había falta de desinfección en distintos puntos a los que la población tiene permitido acudir pese al confinamiento.

La regidora aprovechó para pedir a la oposición "unidad y lealtad y que no trate de sacar rédito con juego sucio". Alega que el bipartito leva "tres semanas intensas de trabajo para facilitar a los vecinos los servicios esenciales en esta crisis sanitaria". Lamenta que en este periodo "no recibimos ninguna llamada de la oposición. Ni una llamada para interesarse ni una propuesta", concluye.

Parroquias del rural

Por su parte el concejal del PP que elevara las críticas sobre la desinfección, Víctor Carballal, alegó ayer que "Moaña no es solo los alrededores del Concello", en referencia al casco urbano. Pide, por lo tanto, que esta desinfección se traslade a las parroquias del rural. Alerta también sobre los aparcamientos disuasorios del entorno de la autovía, que deberían limpiarse con la misma dedicación al ser un lugar de concentración de personas, "al igual que los estancos". Señala que lo que se debe hacer es "contar con un plan de desinfección" que recoja todos estos espacios. Ante las críticas de buscar rédito político por parte de la concejala de Obras e Servizos, Marta Freire, en su Facebook, Carballal se defiende alegando que "no vivo de la política, sino de mi trabajo."