Este mediodía se reúne por primera vez la mesa de contratación del proyecto de recuperación del Camiño Real, técnicamente denominado "Implantación do eixo de mobilidade amable e segura de interconexión dos centros urbanos de Moaña e Cangas", concebido como una alternativa más segura y amable a la PO-551, en Tirán. Abrirán el sobre A, que determinará si todos los candidatos cumplen con la documentación administrativa pertinente. Son siete las empresas que aspiran a ejecutar las obras, en su inmensa mayoría gallegas: Narom SL; Construccións Obras e Viais SA (Covsa); Desmaco SLU; Hordescon SL; Nexia Infraestructuras SLU; Movimientos de áridos y construcciones Arosa SL (Marconsa); y Audeca SLU.
El lote de la obra es cuantioso ya que se cifra en 575.000 euros (IVA incluido), que se financia con cargo al Plan de Remodelación e Mellora da Seguridade dos Viais Municipais, de la Diputación (Deporemse) y con fondos propios del Concello. El organismo provincial asume 488.750 euros y las arcas municipales, 86.250.
El proyecto en el tramo de Moaña contempla una conexión con predominio peatonal y de bicicleta desde la estación marítima de la localidad hasta Cangas, a través del denominado antiguo Camiño Real, que atraviesa la PO-551 a la altura del cruce de Castroviejo.
El camino tiene casi 2 kilómetros en Moaña y, al tener prioridad peatonal, toda la velocidad estará limitada a 20 kilómetros por hora. Su ejecución, con un plazo de seis meses, implica la reordenación de plazas de aparcamiento que dificultan la circulación de los coches como la bajada a la iglesia de Tirán, que seguirá siendo de doble sentido. Aparecerán tres nuevas zonas de estacionamiento en O Con. En la bajada al camping existirán aparcamientos en ambas márgenes. El tráfico se limitará solo a residentes en Masandía y existirán sentidos únicos en la zona de Catro Caminos y en el tramo del cruce de Castroviejo al camping.