El plazo concedido por los vecinos afectados por la subasta de los supuestos bienes de Promalar en Bueu al banco que se hizo con ellos se ha superado de largo sin haber recibido respuesta. Ante esta situación los afectados han decidido convocar una nueva asamblea, que se tendrá lugar este mismo sábado a las 17.00 horas en la Casa do Pobo de Beluso. En ella se debatirán las acciones a seguir, que por recomendación de los abogados se limitarían a básicamente dos vías: emprender un pleito para hacer valer sus propiedades ante el banco o bien optar por esperar a que la entidad intente tomar posesión de esos terrenos. En este sentido los afectados cuentan con una innegable ventaja: la usucapion o prescripción adquisitiva. Esto es, la posesión efectiva y pacífica de esos terrenos durante décadas.
La última asamblea de los afectados se celebró el verano pasado, después de que el Banco Popular -que fue quien pujó por esos terrenos en la subasta judicial- fuese comprado por el Banco Santander. Los vecinos cuentan con otro as en la manga: el documento firmado por los responsables de la inmobiliaria del banco en la que reconocía que las propiedades de los vecinos no se corresponden con lo que la entidad adquirió en la subasta. Los nuevos propietarios del Popular pidieron tiempo para poder estudiar la situación, pero los afectados afirman que ese plazo se superó ampliamente sin recibir ninguna contestación.