Las calles que conectan la Praza Massó con el "exterior" llevan desde su inauguración nombres que aluden a algunas de las marcas que comercializaba la antigua conservera, una manera de rendir homenaje a la fábrica y mantener viva la memoria de una parte esencial de Bueu. Ahora ese homenaje va ir un poco más allá. La Concellería de Urbanismo colocará en las próximas semanas nuevas placas identificativas en estas vías, con un diseño en azulejo y que reproducen los logotipos de aquellas marcas de Massó: Fígaro, Cormorán, Kayrel e Ibis. Una original manera de vincular el esplendoroso pasado industrial de Bueu con el desarrollo urbanístico actual.

La manzana Massó se comunica con las calles Pazos Fontenla, Johán Carballeira y la Avenida Montero Ríos a través de cuatro vías: Fígaro e Cormorán son las que unen la plaza con Johán Carballeira; Ibis es la que desemboca en Pazos Fontenla y Kayrel en Montero Ríos. "Na cabeceira de cada rúa colocaremos unha placa de 31,5x45 centímetros, cunha franxa azul e o escudo do Concello na parte superior e o nome da rúa en letras negras sobre un fondo branco", explica el concejal de Urbanismo, Martín Villanueva. En el otro extremo de la calle, justo en la conexión con la plaza interior se colocarán las placas que reproducen los diseños originales de las marcas que comercializaba Massó, con unas dimensiones de 40x80 centímetros. Cormorán, que se dedicaba a las migas de atún blanco con tomate, y Kayrel, Ibis y Fígaro, que comercializaban sardinas en "en aceite puro de oliva". Los textos de Kayerel e Ibis estaban redactados en francés, anunciando "sardines espagnoles" [sardinas españolas].

Villanueva avanza que la intención del gobierno es unficar de manera progresiva la nomenclatura de todas las calles de Bueu. De este modo se retirarán las habituales placas metálicas verdes y se colocarán otras de azulejo siguiendo el patrón que se empleará ahora en Massó: una franja azul con el escudo en la parte superior y el resto ocupado por un fondo blanco con el nombre de cada una de las vías en letras negras. El diseño ha sido realizado por el taller cerámico de Xavier Claur, en Alzira (Valencia).