La promotora de la nueva obra residencial de Massó, Cuarteirón, junto con los representantes de la antigua conservera, proponen que las calles de la nueva zona urbanística lleven el nombre de las marcas más famosas de la antigua fábrica. Las calles que conectan las obras del Residencial Massó con el resto del casco urbano de Bueu todavía siguen sin nombre. Precisamente por ello, la promotora quiere aprovechar la ocasión para dar un pequeño homenaje a la empresa y fábrica de Massó, que fue tan importante para el desarrollo y la historia del pueblo marinero.

La nueva urbanización cuenta con cuatro calles y. en el centro de la nueva obra, está ubicada una plaza. Las marcas conserveras que se hacían en la industria se reservan para las nuevas calles, que llevarían la placa identificativa con el nombre correspondiente y la imagen serigrafiada de las marcas. De este modo, los visitantes y vecinos de la villa marinera podrán recordar y conectar el nuevo entorno urbanístico con las labores que antiguamente se desarrollaban en la zona. Se trata, por tanto, de una iniciativa que pretende dar una cierta continuidad histórica en el desarrollo de Bueu como zona marinera.

La promotora y el representante de la antigua conservera proponen que la plaza se denomine "Plaza Massó" en homenaje a toda la industria conservera y que en su serigrafía aparezca el tradicional logotipo. Los demás productos seleccionados para el nombramiento de las calles son: Kayrel, Figaro, Cormorán e Ibis.

De este modo, las dos calles que conectan Alcalde Xohan Carballeira con la nueva plaza y, a su vez, con Eduardo Vincenti, se denominarían Fígaro e Ibis. Fígaro sería la calle más cercana a la zona del paseo marítimo, mientras que Ibis estaría más cerca del antiguo campo de fútbol. Ambas se dedicaban a la comercialización de sardinas en aceite de oliva y, en el caso de Ibis, el nombre de la marca aparece acompañado de esta ave roja. Kayrel comunicaría la avenida Montero Ríos con la plaza central. Esta marca también comercializaba sardinas y en su serigrafía aparecía una esfinge egipcia y palmeras en tonos amarillos y azules. Para finalizar, la calle que comunica Pazos Fontenla con la plaza sería Cormorán, que antiguamente comercializaba migas de atún blanco en tomate.