Votación

Hungría ratifica el ingreso de Suecia en la OTAN, clave para el "blindaje" báltico

El aval de la cámara, que sólo ha registrado seis votos en contra, salva el último escollo para el acceso del país escandinavo a la Alianza Atlántica

Suecia se convertirá en el miembro número 32 de la OTAN

Agencia ATLAS / Foto: EP

Gemma Casadevall

"Vamos a apoyar hoy el ingreso de Suecia ", anunció el primer ministro húngaro, el ultranacionalista Viktor Orbán, al abrir la sesión del Parlamento de Budapest destinada a eliminar el último escollo para el ingreso del país nórdico en la OTAN. Correspondió así al último aliado de Vladímir Putin del bloque europeo dar luz verde a un ingreso que completará el blindaje báltico de la Alianza militar occidental frente a Rusia. Suecia es la pieza que faltaba para cerrar un escudo considerado estratégico desde la agresión rusa a Ucrania.

Las presiones de Washington, Bruselas y los principales aliados europeos eran insostenibles incluso para el inflexible Orbán. Unas horas después de ese anuncio, el Parlamento ratificó el ingreso por amplísima mayoría: 188 votos a favor frente a 6 en contra. Casi al unísono, desde Estocolmo, el primer ministro sueco, Ulf Kristersson, calificó de "histórica" la decisión.

Que la bandera de Suecia se ize en la central de Bruselas es ya un mero formalismo. Se cerrará así el "cordón báltico" del flanco este de la Alianza. Noruega y Finlandia tienen respectivamente 197 y 1.340 kilómetros de frontera terrestre con Rusia. Suecia, que no limita por tierra con ese país, desempeñará un papel clave en la defensa marítima y aérea báltica. Especialmente estratégica es la isla sueca de Gotland, a unos 300 kilómetros de Kaliningrado, territorio ruso incrustado entre Lituania y Polonia. A esa región marítima se la ha apodado "el lago báltico de la OTAN", pero ello no implica que sean aguas tranquilas. Lituania, Estonia y Letonia, vienen alertando de la situación en el corredor de Suwalki, la franja de unos 90 kilómetros que separa Kaliningrado de Bielorrusia. Esa línea divisoria entre Polonia y Lituania podría ser, alertan los bálticos, el siguiente objetivo de Putin. De tomar el ejército ruso Suwalki, Lituania, Letonia y Estonia quedarían aislados por tierra del bloque de la OTAN y la UE. Gotland es determinante para la defensa marítima y el control del espacio aéreo del "lago báltico".

El pedregal turco y húngaro

El camino de Suecia hacia la OTAN ha sido considerablemente más largo que el de Finlandia. Ambos países nórdicos rompieron en paralelo su neutralidad militar a raíz de la invasión de Ucrania, hace ahora dos años. También en paralelo solicitaron el ingreso en la OTAN poco después. Era una neutralidad más bien téorica, en tanto que miembros de la UE. En la transición hasta ser miembro de pleno derecho, la isla sueca de Gotland fue escenario clave en las macro maniobras de la OTAN en el Báltico, las mayores de su historia.

Helsinki formalizó su estatus de miembro 31 de la Alianza en un tiempo récord, mientras que Estocolmo quedó pendiente del bloqueo turco y del húngaro. Ankara recriminaba a Suecia dar asilo a opositores y terroristas kurdos -y amenazar con ello la seguridad de Turquía-, mientras que Budapest dio largas a la ratificación por las críticas suecas a la deriva autocrática de Orbán.

Finalmente Turquía dio luz verde al ingreso hace unas semanas, pero Suecia quedó pendiente del visto bueno de Orbán. Todo ingreso en la Alianza está supeditado a la ratificación de cada uno de los estados miembros. La semana pasada se produjo el deshielo con la visita del primer ministro sueco Kristersson a Budapest. Ahí suscribió con Orbán un acuerdo de cooperación militar y la compra de cuatro cazas al país nórdico.