La primera ministra de Reino Unido, Theresa May, recibió ayer la advertencia de que el Parlamento aprobará una prórroga de la fecha de salida del país de la UE en caso de que no se alcance un acuerdo con el bloque en el plazo de 30 días. May se resiste a pedir una prórroga. La iniciativa de obligarla a pedir un aplazamiento fue derrotada en los Comunes el pasado 29 de enero, cuando se le dio el mandato de negociar una nueva cláusula de salvaguarda para Irlanda.