Con solo diez días en el poder, el presidente interino de Brasil, Michel Temer, perdió el lunes al ministro de Planificación, Romero Jucá, en medio de un escándalo desatado por una escucha telefónica en la que el dimitido afirma que maniobraría para obstruir las investigaciones en la estatal Petrobras en el caso de que Temer llegase a la Presidencia. La grabación fue en marzo, antes de que la Cámara aprobase dar luz verde al proceso por el que el día 12 el Senado puso en marcha el juicio político que obligó a Dilma Rousseff a apartarse de la Presidencia durante seis meses.