El desencuentro entre Olmert y Bachar al Asad

En una entrevista concedida a la emisora France-Inter, Al Asad afirmó que esperaba de esta cumbre "resultados concretos" y no "simbólicos que pudieran crear polémica".

Aunque Siria e Israel mantienen negociaciones indirectas, bajo el auspicio turco, desde mayo pasado, son todavía dos países oficialmente en estado de guerra.

"No somos técnicos que conozcan el dossier, que son los que están en la medida de discutir los puntos técnicos", dijo Al Asad.

En una rueda de prensa celebrada el pasado sábado en París, previa a la cumbre de la UPM, el presidente sirio resaltó que las negociaciones indirectas con Israel se centran en asuntos técnicos relacionados con la retirada israelí de los Altos del Golán, ocupados en 1967.

"Hay negociaciones en curso auspiciadas por Turquía que tienen como objetivo recuperar la confianza entre Siria e Israel, poner las bases de un terreno común sobre el que construir la paz", dijo Al Asad.

El presidente sirio dio a entender en esa rueda de prensa que, a su juicio, las conversaciones directas no se iniciarán mientras continúe la administración de George W.Bush en Estados Unidos porque "no está interesada en el proceso de paz".

El primer ministro turco, Recep Tayip Erdogan, se entrevistó ayer por separado con Olmert y Bachar Al Asad, con lo que reprodujeron entre altos mandatarios las negociaciones indirectas que mantienen desde mayo.

Estos contactos indirectos no impidieron que Al Asad se ausentara media hora antes del discurso que pronunció Olmert ante el plenario de la cumbre sobre la Unión por el Mediterráneo.

En unas declaraciones hoy a la emisora Europe 1, el ministro francés de Asuntos Exteriores, Bernard Kouchner, dijo que los israelíes habían felicitado a Francia por invitar a Bachar al Asad a París.