Los asistentes acudieron con flores en recuerdo de las víctimas a una convocatoria que tuvo su punto culminante a las 8.50 horas (una más en España), cuando se produjo la explosión de la primera de las cuatro bombas que sembraron el caos en Londres la misma semana en que la ciudad fue confirmada como sede de los Juegos Olímpicos de 2012.

Presidida por el alcalde, el conservador Boris Johnson, y la secretaria del Gobierno para la capital, Tessa Jowell, la ceremonia reunió también a numerosos viajeros de entre los miles que transitan por la estación que se detuvieron para homenajear a los fallecidos, al igual que aconteció en otros lugares trágicamente relacionados con el 7 de julio: las paradas de metro de Russell Square, Aldgate y Edgware Road, y la de bus de Tavistock Square.

En su declaración, el regidor recogió un reconocimiento al "coraje de los heridos" y las "plegarias para todas las víctimas y sus familiares", mientras que la representante del Gobierno reivindicó la "gran valentía" mostrada por los londinenses con el "progreso que han hecho al seguir adelante con sus vidas desde las atrocidades de hace tres años".

HOMENAJES Y COMPENSACIONES

Aparte, en el día de hoy está previsto un homenaje privado para los directamente afectados que quieran compartir sus experiencias, mientras que algunas de las víctimas y familiares se han dirigido específicamente a los puntos que marcaron su 7 de julio particular, si bien parte de los que lo vivieron de alguna forma han apuntado que prefieren no destacar la efeméride con el objetivo de olvidarlo.

Además, la conmemoración ha puesto de manifiesto otros datos relacionados con la tragedia, como las compensaciones para los 700 heridos que produjo la cadena de atentados, de los que 70 están a punto de recibir el pago íntegro después de que, según el Servicio de Compensaciones por Daños Criminales, el 90 por ciento de los casos estén "plenamente resueltos", tras un desembolso de casi 10 millones de euros (7,5 millones de libras).