La última víctima mortal fue Hassan Assaliya, un civil palestino de sesenta años de edad que perdió la vida en un ataque aéreo al este del campo de refugiados de Yabalia, en el norte de Gaza, indicó el responsable del servicio de emergencias del Ministerio palestino de Sanidad, Moawiya Hasanein.

Assaliya recibió el impacto de la bomba cuando cultivaba sus tierras, según testigos.

En este ataque también resultaron heridos otros dos civiles, uno de ellos una joven que se encuentra en estado grave, según Hasanein, quien inicialmente confundió las víctimas con milicianos de Hamás.

El Ejército israelí confirmó el ataque aéreo y aseguró que tenía por objetivo una lanzadera de cohetes Al Kasam, sin informar de daños personales.

A primera hora de la mañana, una niña palestina de nueve años, Hadil al Sumiri, pereció al impactar en su casa un proyectil lanzado por un tanque israelí que hirió a otros tres miembros de su familia en el poblado de Al Qarara, en el sur de la franja.

El Ejército israelí todavía no ha confirmado ni desmentido el ataque y se ha limitado a indicar que un tanque destruyó una lanzadera de cohetes en esta zona al este de la ciudad de Jan Yunis, donde tropas israelíes entraron la pasada madrugada con ocho tanques y dos excavadoras.

Un portavoz militar subrayó además que las milicias palestinas han lanzado desde allí numerosos cohetes Al Kasam y proyectiles de mortero contra poblaciones del sur de Israel, uno de los cuales mató a un civil israelí la pasada semana en el kibutz Nir Oz.

En esa misma comunidad cooperativa, un proyectil hirió hoy de levedad a un israelí al impactar en una factoría de pinturas.

Poco después de la muerte de la menor palestina, Mohamed Said, un activista del brazo armado de Hamás, las Brigadas de Ezedín al Kasam, perdió la vida en un tiroteo con soldados israelíes, también en Al Qarara.

Su cuerpo fue trasladado al hospital Naser de Jan Yunis una hora después de su fallecimiento, indicó Hasanein.

El Ejército israelí impidió a las ambulancias auxiliar inmediatamente al miliciano porque yacía cerca de la valla fronteriza entre Gaza e Israel, indicaron residentes.

Por otra parte, en Cisjordania, el Ejército israelí arrestó de madrugada a 28 palestinos, según fuentes de seguridad de ambas partes.

La mayoría de las detenciones tuvieron lugar en Naplusa, Tulkarem, Belén y Hebrón, así como en el campo de refugiados de Yenín, indicaron las fuentes de seguridad palestinas.