Son las seis y media de la tarde en el cruce que conecta las calles Merlo y Estorniño en Vigo. Allí, un pequeño grupo de peatones persigue a un hombre a gritos: "¡Eres un sinvergüenza!". Se trata de J.A.V.V., el anciano de 79 años que se dedica a rayar coches en O Calvario y A Doblada además de meter palillos en cerraduras, no solo de vehículos, sino también de portales y negocios.