El 911 Speedster causó sensación cuando fue presentado como prototipo. Ahora, Porsche lleva este biplaza descapotable a la producción. El 911 Speedster combina las aspiraciones de un vehículo purista orientado al conductor con una tecnología de competición apta para el uso diario.

El 911 R y el 911 GT3 han servido como base para su desarrollo. Un motor bóxer atmosférico de cuatro litros y altas revoluciones, con 510 caballos de potencia, proporciona una experiencia de sonido apasionante en el habitáculo. La transmisión GT de seis velocidades es de accionamiento manual.

Su rasgo más personal es la doble cúpula que sirve de tapa para el compartimento de la capota, un símbolo diferenciador en este deportivo desde el 911 Speedster de 1988. Es el componente más grande y complejo hecho de una sola pieza de plástico reforzado con fibra de carbono que Porsche ha utilizado hasta la fecha en un modelo de carretera. Las dos cúpulas dejan el espacio suficiente para el sistema de protección antivuelco que lleva este biplaza en su equipamiento de serie, igual que el 911 Carrera Cabriolet. Una ligera estructura para el techo reemplaza a la capota básica del concept car. A pesar de su diseño purista, la capota de lona es adecuada para el uso cotidiano. La combinación de un marco más bajo para el parabrisas y de unas ventanillas laterales más pequeñas proporciona un perfil atlético al 911 Speedster.