"Tipo fresco", acento porteño, atrevido. Razón, Pescanova; año, 1977. Y por más que un langostino no tiene una esperanza de vida superior a los dos años -lo dice el Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero argentino (Inidep), este lleva casi cuatro décadas paseándose por las neveras y la memoria colectiva. Sin pudor, sin despeinarse, incluso sin que en la compañía le hubiesen hecho el menor caso -a nivel de márketing- en los últimos diecisiete años. Rodolfo volvió ayer a reclamar su cuota de protagonismo con el mismo descaro que antaño, pero con más bigotes. Sin sombrero. En la inauguración de la vigésima edición de Conxemar. Un día antes del cumpleaños del consejero delegado de la compañía, Ignacio González. El regreso de este símbolo "era una demanda de los clientes. En realidad Rodolfo nunca se fue, ha estado en la memoria y nuestros corazones día a día, y eso es lo importante", destacó ayer el CEO. "Lo lógico era recuperarlo".
El rey de la fiesta ayer en el stand de Pescanova será el protagonista de la campaña navideña de la empresa, aunque González no quiso desvelar los detalles. Entre los directivos de la firma apuntaron que Rodolfo refinará su acento, ya sin el toque porteño que coloreaba la Navidad hasta 2001 por la tele. "Gracias a la popularidad y simpatía de este personaje, la marca consiguió reforzar su notoriedad, formando parte de la cultura popular, protagonizando durante décadas los espacios publicitarios televisivos que entraban en las casas de los españoles", recordó la multinacional. Nueva Pescanova pretende que los Rodolfos se asocien a una garantía de calidad, trazabilidad y frescura en el langostino vannamei. "Se ha mejorado el proceso de elaboración, pionero y único en el mundo, donde los langostinos son seleccionados uno a uno, envasados y cocidos preservando su total integridad, por lo que su apariencia y textura son insuperables, siendo sus largos e intactos bigotes su garantía de calidad", añadió la firma.
Además del regreso de este personaje, Nueva Pescanova ha transformado el formato de su expositor para adaptarlo a un formato street market, más diáfano y en el que también destacan nuevos productos convenience, refrigerados o listos para comer como los bocados crujientes de merluza, las piruletas de langostino, los chopirones al huevo, los miniburguers de merluza, mejillones gallegos cocidos en su jugo, pulpo cocido en su jugo, palitos de mar y anguriñas.
