El CES ve "falta de dimensión social" en la política pesquera común y niega que el sector sea "exterminador"

El presidente del CES, Marcos Peña, ha señalado que la reforma adolece de una mayor colaboración entre el ámbito técnico-científico y las empresas y administraciones. Asimismo, ha subrayado la necesidad de reforzar los controles en la entrada de productos importados, ya que el sector transformador y comercializador se ve afectado por un doble problema, el 'dumping' laboral y el 'dumping' higiénico-sanitario, que provoca que las empresas compitan en "condiciones de inferioridad" con respecto a terceros países.

Por otra parte, Peña ha abogado por una "conciliación" de intereses en lo que respecta a la sostenibilidad de los caladeros, y ha apuntado que los representantes del sector pesquero "no tienen un marchamo que los distinga como contaminadores o exterminadores".

Según el informe del CES, el actual sistema de cuotas genera "cierta parálisis" y es "poco eficaz", por lo que se deben implementar medidas que permitan intercambios permanentes de cuotas entre los Estados miembros.

DESCARTES Y DIMENSION SOCIAL

Con respecto a la política de descartes, el Consejo Económico y Social aboga por una "regulación específica" para el sector pesquero artesanal, que incluya medidas compensatoria para esa flota. Según el CES, el problema de los descartes en el caso español, "está más relacionado con la aplicación del criterio de estabilidad relativa que con el uso de determinadas artes".

Finalmente, el informe del órgano consultivo califica la normativa europea de "superficial" en lo que se refiere a la dimensión social del sector. Así, critica la ausencia de medidas que refuercen la mejora de las condiciones de vida y de trabajo de los marineros o el papel de la formación.