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Las familias destinan 300 euros por hijo en libros y material para el nuevo curso

El precio puede escalar hasta los 400 euros con el comedor, las extraescolares o el uniforme | “Antes aún los reciclábamos pero ahora con el nuevo temario ya no”, lamentan las Anpas

La presidenta de FOANPAS, Iria Salvande, posa con los libros de texto de sus hijos para este curso en el CEIP Seis do Nadal. Ricardo Grobas

Las lágrimas de muchos niños en su primer día de cole también es la de muchas familias que tratan de cuadrar sus bolsillos con los gastos que supone el inicio de las clases. Este año, entre libros de texto y material escolar los vigueses se verán obligados a destinar una media de 300 euros por hijo para afrontar este nuevo curso que arranca hoy, 8 de septiembre, para todas las etapas educativas en la ciudad. “Tengo dos hijos y solo los libros fueron 200 euros por niño, con el material y demás ya nos ponemos en cien euros más. Antes aún podíamos reciclarlos, pero ahora con el nuevo temario ya no”, lamenta Víctor, vicepresidente del ANPA del CEIP Balaídos.

Y es que la entrada de la nueva ley educativa, la LOMLOE, que se aplica únicamente en los cursos impares –1º, 3º y 5º de Educación Primaria; 1º y 3º de la ESO; y 1º de Bachillerato– obligó a un cambio de títulos para adaptarse a los nuevos currículos. Muchos de ellos no llegarán para este inicio de clases al no ser capaces las editoriales de sacarlos a tiempo por la demora en los reales decretos del Ministerio.

Esta readaptación de los temarios motivó un gasto a mayores para todas estas familias que reutilizaban libros de años anteriores. “Mis dos hijos están en cursos impares y hemos tenemos que comprarlo absolutamente todo, 250 euros fue el coste de los libros de Primaria y 350 euros los de la ESO”, cuenta Sonia, madre de dos alumnos del Colegio Mariano. En su caso sí han podido reciclar algún material como diccionarios o estuches, pero han invertido otro tanto en libretas o recambio de archivadores. “En mi caso lo pillamos todo en junio, porque en la librería ya nos avisamos que todo el papel estaba aumentando mucho de precio. Así que preferimos adelantarnos”, explica Sonia.

Su situación coincide con la del presidente del ANPA del CEIP García Barbón. “Se ha notado una inflación tremenda. En el caso de mi hija, que está en curso impar y se le aplica la nueva ley, hemos tenido que comprarle todo de cero, cuando siempre heredábamos los libros de la vecina”, cuenta Xacobe Cabrera, quien junto con otros padres y madres han elaborado un convenio con librerías y comercios de la zona para adquirir en sus locales los ejemplares y el material educativo con un descuento. “Es la manera de costearnos los libros a un precio menor y de paso ayudar al comercio local”, explica este padre.

A los gastos fijos de esta particular cuesta de septiembre se unen también otros servicios muy demandados por los progenitores en pro de la conciliación familiar: el comedor, transporte escolar, actividades extraescolares... “Para nosotros son fundamentales, y siempre abogamos por que hagan estas actividades en el centro”, incide Sonia.

Programa E-Dixgal

Frente a esta situación, y desde hace años, las administraciones han puesto a disposición de las familias distintas becas para la adquisición de los libros o material escolar así como un fondo solidario de libros gratuitos. Sin embargo cada vez son más los centros, y en consecuencia, los alumnos que ya no precisan de libros físicos en sus clases.

Una de las imposiciones que la pandemia trajo para quedarse fue la digitalización. Así, un total de 31 centros educativos en Vigo funcionan a través del programa E-Dixgal: cada alumno cuenta con un ordenador portátil y se trabaja a través del aula virtual y recursos proporcionados por cada profesor. La propio aula también está digitalizada, , con wifi, un encerado digital interactivo, un proyector y un equipo para cada profesor. “Nosotros lo tenemos habilitado en todas las asignaturas menos una; los niños ya no emplean libros de texto, solo un cuadernillo para los ejercicios”, explica Eva López, director del IES Valadares, uno de la treintena de centros E-Dixgal en el municipio. Es válido para los cursos de 5º de Primaria a 4º de la ESO.

“Mi hijo empieza este año en 5º por lo tanto ya contamos con ordenador en el aula y no hemos tenido ningún gasto en libros; y en cuanto al material aún desconocemos qué nos hará falta”, explica Adela, madre de una alumna del CEIP Otero Pedrayo.

Idéntica situación se encontraron los padres de las ANPAS del Colegio Apóstol y Colegio Las Acacias. “Solo hemos tenido que comprar un libro para Lingua Galega, el resto todo a través del ordenador”, explican los primeros. “El gasto en material ha sido poquísimo porque cuentan con el libro digital”, explican desde el ANPA de Las Acacias.

Más de 400.000 libros en el fondo solidario de la Xunta

Para paliar este contexto de inflación desbocada, desde la Consellería de Educación se ha puesto a disposición de las familias tres tipos de ayuda para libros de texto y material escolar. Por un lado está el fondo solidario de libros; dirigido a alumnos de Primaria y ESO, se asignan libros de antiguos alumnos según la renta de cada familia: las familias con una renta inferior o igual a 6.000 euros pueden disponer de seis libros, y hasta 10.000 euros tienen acceso a cuatro manuales. Este fondo lo gestiona el propio centro educativo, a final de curso, el alumno devuelve los libros que usó y se distribuyen entre los alumnos del próximo curso según renta. El año pasado se repartieron 464.000 libros entre 80.359 alumnos de toda Galicia.

En cuando a las ayudas para libros, fueron 26.846 los estudiantes que recibieron están ayudas con importes de 140 euros a 275 euros. Y por último, las ayudas de material escolar, destinadas al alumnado de Primaria y ESO. El año pasado fueron 93.000 alumnos beneficiados con cheques de 50 euros. En total, la Xunta destinó 25,6 millones a estos programas.

UN TOTAL DE 52 NIÑOS UCRANIANOS REFUGIADOS INICIAN CURSO EN VIGO


Uno de los retos al que tuvieron que hacer frente diversos centros educativos de Vigo fue el de acoger a diversos niños ucranianos después de que sus familias llegasen refugiadas a la ciudad para huir de la guerra en su país tras la invasión rusa. Para este inicio de curso son 52 los que continuarán matriculados en colegios e institutos de la ciudad para proseguir con sus estudios y evitar regresar a su país todavía en medio de un clima bélico.

Este medio centenar de refugiados se sumarán a los 37.000 chicos y chicas de todas las etapas educativas que inicia hoy día 8 de septiembre las clases. Así, serán 5.956 los niños que inicien curso en Educación Infantil, 15.255 se incorporarán a las aulas de Educación Primaria, 198 lo harán en los centros de Educación Especial, 11.439 escolares cursarán la ESO en Vigo y 4.233 estudiarán Bachillerato.

Entre las principales novedades que caracterizan la vuelta a las clases será el fin de los protocolos COVID que regían en los dos años anteriores a raíz de la pandemia sanitaria.

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