La ola de calor asfixia a la ciudad y quienes acuden a las playas en busca de un baño refrescante se encuentran temperaturas que rondan los 18-19 ºC. No son las más elevadas que ha alcanzado la Ría en los últimos años, de hecho, entran en el rango esperado, pero sí es llamativo que se extiendan durante tantos días. Así que durante esta semana, los chapuzones en Vigo pueden compararse con los de Tarifa, donde los registros, influenciados por las corrientes del estrecho de Gibraltar, rondan los 18 ºC frente a los casi 23 grados de la boya de Aemet en Cádiz. Y también en el Cantábrico se están registrando esta semana marcas tan elevadas como los 22,3 de Bilbao.
La jornada de ayer fue brumosa y, a pie de playa, la temperatura bajó hasta los 25 ºC para disfrute de los bañistas, mientras que el agua se mantuvo en los 18 ºC, según los registros de Torallamar. “De momento, los valores están dentro del rango de variación habitual, aunque llevamos muchos días en la parte superior de ese rango. Esto se debe a que los episodios de viento del norte que ha habido hasta el momento no han tenido suficiente intensidad, salvo de manera muy puntual, para que el agua fría llegue a superficie y se mantenga algunas jornadas”, explica el oceanógrafo Jose González, responsable de esta plataforma de observación del Centro de Investigacións Mariñas (CIM) de la UVigo.
Los expertos de la Estación de Toralla sí han observado agua fría y rica en nutrientes en profundidad. Y la semana pasada, debido al viento del norte, hubo algunos afloramientos en la parte interior de la Ría que bajaron “ligeramente” la temperatura superficial en general.
“Pero la intensidad de esos afloramientos ha sido menor que en años anteriores, por lo que ese descenso ha sido menor. De hecho, solo un día bajó de los 15 grados. Durante el resto del mes de julio en muy pocos momentos ha bajado de los 16 grados y normalmente ha estado entre los 17 y los 18 grados”, añade González.
Y en los últimos días ha subido hasta los 19 ºC. “La intensidad de la ola de calor, unida a que en estos días no había previsión de vientos intensos, han hecho que el agua de la Ría se renueve más despacio. Y esto ocasiona que se mantenga en valores altos”, concluye el responsable de Torallamar.
Previsiones de descenso
La situación podría empezar a cambiar ligeramente ya que las previsiones de MeteoGalicia para todo el fin de semana en las Rías Baixas muestran una media de 20 grados pero en playas como Samil y Rodas la bajan desde hoy hasta los 17 grados.
Mientras tanto, la ciudad alcanzó ayer una máxima de 33,6 ºC y, según el pronóstico, el mercurio seguirá por encima de los 30 grados hasta el domingo, cuando Galicia empezará a alejarse de la influencia anticiclónica.
MeteoGalicia espera una alternancia entre cielos con nubes y claros y otros poco nublados o despejados. Y las temperaturas, aunque se encontrarán “en descenso moderado”, seguirán siendo “muy altas” para esta época del año.
Vigo alcanzará hoy una máxima de 36 ºC y la temperatura bajará por la noche hasta los 25 ºC, lejos del registro histórico de 29,1 grados alcanzado en la madrugada del pasado día 13. Mañana sábado los termómetros oscilarán entre los 32 ºC y los 24 ºC. Y para la jornada del domingo se espera una máxima de 33 grados y una mínima de 23.
