Festivales, conciertos y playa. El cóctel estival por excelencia ya es el más demandado por los vigueses. Y es que aunque el tiempo ayer no lo puso fácil, la música se convirtió en la gran aliada del ocio en la ciudad. Para todos los gustos y en múltiples localizaciones.
Tras un año de parón, una de las fiestas más populares de los barrios de Vigo dio ayer el pistoletazo de salida. Se trata de las fiestas de Coia, eso sí sin atracciones ni venta ambulante, pero con cinco actuaciones musicales para conmemorar su semana grande.
Las celebraciones arrancaron con el concierto de Rubén de Lis a última hora de la tarde y el espectáculo de gaitas Mitic, una hora después. La música continúa com protagonista de la jornada de hoy en sesión vermú con la Banda de Música de Valadares, a las 12.30 horas. Por la tarde, a las 19.30 actuará Magín Blanco, tras lo que llegará el espectáculo “Vigo bailando”.
La música también sonó en otros escenarios de la ciudad. Las uniones musicales de Cabral y Coruxo actuaron al final del día en el Paseo de Alfonso, en el marco del festival “Vigo, un mar de bandas”. Hoy será el turno de Delicias de Cabral y UVCD de Candeán a las 21.00 horas.
Y el XV festival de Habaneras también arrancó ayer de la mano de las corales Agarimo, Voces do Torreiro y Alborada de Cabra, en la plaza de Gallegos Ilustres, y las corales Santa Clara, Perla del Atlántico y Allegro en el mercado del Progreso. En el día de hoy, el turno será para la Coral CVC de Valladares, la Coral O Coto y la Coral San Mamede de Zamáns en Plaza dos Ilustres a las 19.30 horas. Al mismo tiempo, pero en el mercado de O Progreso, actuarán la Coral María Auxiliadora, el Coro Rociero y la Coral San Pelayo de Navia.
A mayores, la terraza del Mar de Vigo sumó ayer un nuevo lleno dentro del Festival Terraceo. Y lo hizo de la mano del grupo catalán Sidonie, que hoy tendrá una segunda actuación en el Auditorio. Las entradas para ambas fechas se agotaron a las pocas horas de su puesta a la venta, evidenciando no solo las ganas de conciertos sino también el tirón del grupo, ya habitual de las festividades viguesas.
Y qué sería de un verano sin las playas. Aunque la climatología no acompañase, el alcalde Abel Caballero dio por inaugurado esta estación con el izado de las banderas azules que lucirán diez arenales en Vigo. Acompañado por las concejalas Elena Espinosa y Nuria Rodríguez, el regidor fue el encargado de elevar hasta el punto más elevado del mástil de Samil una de las diez banderas azules que ya se colocan desde ayer en todos los arenales de la ciudad: A Punta, Carril, Tombo do Gato, Argazada, Fontaíña, O Vao, Canido, Fortiñón y Rodas, en Cíes.
Trabajo de salvamento
Caballero aprovechó también el acto para poner en valor el trabajo del equipo de Salvamento y Socorrismo, Protección Civil así como de la Policía Local adscrita a las playas, uno de los requisitos por los que son concedidas las banderas azules. “Vuestro trabajo y vuestra función es de lo más importante. Tenemos unas playas magníficas y vuestra vigilancia, vuestro cuidado y atención se va a seguir encargando de que continuemos siendo un modelo de actuación durante el verano en playas. Eso tiene un valor infinito”, afirmó Caballero.