Su captura daba para una buena mariscada, pero todo lo pescado regresó al mar. Ocurrió el pasado sábado sobre las 12.30 horas. Según informa la Policía Local, el guardia rural alertó de la presencia de un furtivo en la playa de O Portiño.

Al lugar en apoyo se trasladó la Unidad Ejecutiva, procediendo a interceptar a la persona que estaba realizando la actividad sin autorización.

El aludido resultó ser : Á. R. V, de Vigo y 59 años de edad, cuyo no desdeñable botín era de 3,7 kg de erizo, 1 kg de caramuxos y 5kg de centolla.

El material recuperado fue devuelto al mar, siéndole incautados los utensilios utilizados para su captura y realizando los trámites administrativos correspondientes.