Después de meses de parón, administrativo y de actividad, a causa del Covid, la Autoridad Portuaria afronta una nueva fase de inversiones en el Puerto, que se centran en la terminal Ro-Ro, donde las obras suman unos cuatro millones de euros, que incluyen el ya finalizado el nuevo edificio de control de accesos o la última fase de ejecución de la reordenación de accesos. Además, está a punto de licitarse la nueva señalización con un pórtico luminoso de leds de 11 metros.
En materia de seguridad, se han iniciado los trabajos de mejora del cierre perimetral de la Terminal para mejorar la seguridad del recinto. Asimismo, está en fase de proyecto la ejecución de un nuevo puesto para el control aduanero fronterizo por parte de la Guardia Civil, reubicando el actual para el control de la mercancía en la salida de la Terminal. Además se ha ganado espacio, con diversos traslados y obras, para ampliar la superficie de almacenamiento de vehículos.
