Cuando comenzaron a aparecer los primeros casos de coronavirus, el principal fármaco con el que se intentó combatir es la ya famosa hidroxicloroquina. Con el paso de los meses, sin embargo, distintos sectores sanitarios y científicos han puesto en duda su idoneidad. Es más, hace escasos días la prestigiosa revista médica británica The Lancet publicaba un estudio que apuntaba a que este medicamento no solo no ayudaba a combatir el Covid-19, sino que provocaba efectos dañinos. Esta investigación, realizada entre una muestra de casi 100.000 enfermos de coronavirus ingresados en hospitales de todo el mundo, incluso llevó a la OMS a paralizar los ensayos clínicos con este fármaco. Todo ello ha generado un auténtico debate social y científico y dispara las dudas sobre la conveniencia de utilizar este medicamento en enfermos de Covid-19.
Este caldo de cultivo no ha sido ajeno a los pacientes que sufren Lupus Eritematoso Sistémico (LES), cuyo tratamiento base es precisamente la hidroxicloroquina. Por ello buena parte de la videoconferencia que el servicio de Reumatología del Complejo Hospitalario Universitario de Vigo (Chuvi) y el grupo de investigación Iridis del Instituto de Investigación Galicia Sur sobre distintos aspectos del lupus en los tiempos del coronavirus ha versado sobre este polémico tratamiento. Participaron unas ochenta personas, algunas pertenecientes a diversas asociaciones y también médicos especialistas, pero en su mayoría fueron pacientes que querían resolver dudas acerca de la hidroxicloroquina, especialmente sobre si es seguro seguirla tomando. José María Pego, reumatólogo del Chuvi y director del grupo Iridis, lanzó un mensaje de tranquilidad. "Es normal que estén preocupados con todo lo que están teniendo que escuchar estos días, pero les he transmitido que se trata de dos enfermedades (coronavirus y lupus) muy diferentes. Lo que les he intentado trasladar es que no deben abandonar el medicamento, que además ha aumentado su efectividad y la supervivencia en las personas que tienen lupus", explica el doctor. Para justificar su postura se ampara en un estudio realizado a 4.000 personas que padecen esta patología autoinmunitaria durante diez años y la tasa de enfermos que han presentado efectos adversos (especialmente problemas digestivos y alguna afectación en la retina) es mínima.
"Los efectos secundarios de la hidroxicloroquina suelen aparecer en dosis más elevadas. En los pacientes con lupus la dosis es más baja y más prolongada en el tiempo que en los que padecen coronavirus. Además hay que tener en cuenta que las interacciones con otros medicamentos son distintas y también influyen. Por ejemplo en el Covid-19 se utiliza conjuntamente con antivirales, mientras que en el lupus confluye con otro tipo de fármacos", explica José María Pego. Para explicar las posibles contraindicaciones que la hidroxicloroquina puede tener en pacientes con coronavirus, el doctor asegura que cuando comenzaron los primeros casos había una gran incertidumbre y no se había estudiado en profundidad el patógeno, "por lo que hubo que recurrir a fármacos que ya existían sin ensayos clínicos que avalasen su uso en personas contagiadas con Covid-19". "Pero si existen ensayos que demuestran su efectividad para tratar el Lupus Eritematoso Sistémico", apunta el doctor.
En el área sanitaria de Vigo hasta el momento solo ha habido una persona con lupus que ha dado positivo por coronavirus, y además era asintomático.
En la videoconferencia, realizada en el marco de los actos del mes dedicado a esta enfermedad autoinmunitaria, y en ella participaron no solo pacientes y profesionales del área de Vigo y de Galicia, sino también de distintos puntos de España e incluso de Portugal y Argentina.
