El hospital Álvaro Cunqueiro cuenta con un protocolo para pacientes de coronavirus ingresados en la unidad de críticos que consiste en la intervención de fisioterapeutas para acelerar su recuperación. La intervención se realiza entre las 24 y 48 horas del ingreso del paciente en la UCI y se le dispensa una combinación de dos terapias: la respiratoria y la motora. La primera se lleva a cabo a través de unas maniobras manuales muy especializadas de presión y descompresión de las costillas y pulmones y busca drenar las secreciones, muy habituales en enfermos intubados, para evitar flemas que generen complicaciones respiratorias. La terapia motora, por su parte, pretende recuperar la movilidad y el mantenimiento de la autonomía del paciente.
Hasta el momento, los fisioterapeutas del Chuvi han tratado ya a 47 personas con Covid-19, 38 de ellas en las unidades de críticos y nueve en las plantas de hospitalización. Según los datos ofrecidos por el Sergas, el 60% de los enfermos ingresados en las UCI, tras el alta, no vuelven a trabajar durante el primera año, mientras que un 88% de aquellos que recibieron fisioterapia durante su estancia en estas unidades pueden reincorporarse a su puesto durante ese primer año.
"Estamos muy satisfechos ya que gracias a estos tratamientos hemos evitado complicaciones asociadas a una intubación prolongada, como las traqueotomías, o las derivadas de pérdida de fuerza o tono muscular. La mayoría de los pacientes tratados pueden salir caminando de estas unidades, siendo más rápido el retorno a su vida laboral. Contamos con diez profesionales que desarrollan estas prestaciones todos los días de la semana, incluidos sábados y domingos" explica Antonio Chamorro, coordinador de la Unidad de Fisioterapia del Álvaro Cunqueiro.
