La sentencia del juzgado de Pontevedra, que condena a Audasa a devolver los peajes cobrados durante 81 colapsos registrados entre febrero de 2015 y junio de 2018 en el entorno de Rande, fue uno de los temas que marcaron el debate político. Desde el PSdeG, su secretario general y candidato a la presidencia de la Xunta, Gonzalo Caballero, insistía ayer en que su formación "está con los viajeros" de la AP-9. "Cuando hubo obras que impidieron un tránsito ágil hay que tomar medidas para que las concesionarias tengan que dar cuenta de lo que implica a los viajeros", recalcó el líder de los socialistas gallegos tras reunirse con la regidora herculina, Inés Rey.
Gonzalo criticó que fue el ejecutivo de José María Aznar quien prorrogó la concesión de la autopista hasta 2048 y censuró que "el Gobierno de Rajoy, con Ana Pastor, puso los peajes altísimos".
El diputado autonómico del BNG, Luis Bará, celebró a su vez el "avance" que supone la sentencia del juzgado de Pontevedra. "Deja con el culo al aire a la Xunta y al Ministerio de Fomento", incidió el nacionalista, quien lamentó que "con su complicidad no fueron capaces de pararle los pies a Audasa en sus prácticas abusivas".
Bará censuró también que tuviesen que ser la Fiscalía y el Juzgado los que "plantasen cara" a la concesionaria, mientras el Gobierno gallego no activaba "ninguna iniciativa. A la Xunta le planteó una oficina que asesore e informe a los afectados por los atascos.
