Tras un año al ralentí favorecidas por una mejora generalizada del escenario económico, las subastas judiciales vuelven a remontar. Y no lo hacen solo en cuanto al número de expedientes, sino también en relación al valor de los bienes que salen a venta pública. Tanto es así que de las 64 subastas que los juzgados de Vigo iniciaron en 2019, una decena superaron el millón de euros, un 14% del total.
Concretamente, solo el valor de los bienes que representan estas opulentas subastas asciende a los casi 70 millones. Es significativo también que buena parte de ellos se correspondan con un único expediente. Data del mes de marzo, cuando el Juzgado de Primera Instancia 4 de Vigo abrió la puja por un edificio en calle Aragón, haciendo esquina con calle Bailén. Se trata de uno de los de mayor envergadura y salió a subasta pública en forma de un único lote, si bien el inmueble cuenta, tal y como viene reflejado en su expediente, con 5 portales, 4 sótanos destinados a plazas de garaje y trasteros, locales comerciales y 6 plantas altas y planta de bajo cubierta aglutinando un total de ciento cincuenta y cinco viviendas. ¿Su valor? Más de 43,5 millones de euros (recoge el BOE). La puja, instada a favor de la Sareb (Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria, más conocida como el "banco malo") concluyó desierta.
También en marzo, otra sala civil puso a disposición de los mejores ofertantes otro bloque al completo en Gran Vía, 54; muy próximo a Plaza España. El edificio situado en una de las principales arterias de la ciudad salió a puja con 51 lotes diferentes divididos en 25 viviendas, 6 trasteros y 20 garajes. Su valor rondaba los 12,5 millones de euros, cifra semejante a la que se reclamaba por su acreedor, en este caso también la Sareb: 11,4 millones. Seis de los bienes ofertados sí lograron obtener un puja, la más alta fue la aportada por un estudio en la séptima planta del bloque por 139.984 euros.
Esta falta de postores suele ser lo habitual en las subastas judiciales, por eso llama especialmente la atención el caso de otro edificio sacado a venta pública hace poco más de un mes. En diciembre se daba por concluida la subasta de 17 viviendas -en lotes separados- del nº 12 de la calle Brasil, tal y como figura en el BOE. La veintena de pisos, valorados en su totalidad en 2,7 millones de euros, recibieron pujas, incluido uno que se encontraba en régimen de alquiler. También en calle Sevilla se postularon seis viviendas -con sus garajes y trasteros- por 2,7 millones de euros. También todas recibieron pujas.
Si bien todas las subastas cuentan con un plazo de 3 semanas antes de su conclusión, no siempre se llega a cumplir, y alguna de ellas se suspende temporalmente para corregir errores de forma o tasación. Es el caso de otras dos millonarias abiertas en sendos juzgados vigueses: un edificio en Alfonso XIII y un único piso en calle Doctor Toscano. El primero de ellos viene reflejado en el BOE como una "casa" con entrada desde la citada vía así como por Travesía de Santiago (linda directamente con la Iglesia de García Barbón) y cuenta con tres plantas de tres viviendas cada una más un bajo. Su valor supera los 3,1 millones de euros. La reanudación de la subasta está prevista para el 13 de enero. En cuanto al domicilio en el barrio de A Doblada, destaca por no tratarse de un gran inmueble o bloque de pisos, sin embargo su valor se ha fijado en casi 1,2 millones de euros.
No solo de edificios se alimentan las subastas. Dentro de estas ventas públicas millonarias también destacan dos grandes naves industriales: una en Candeán por 1,7 millones y otra en Coia -la última del año- valorada en 2,5 millones y que engloba dos grandes pabellones y un edificio destinado a oficinas. Precisamente la décima subasta millonaria del año se corresponde con un lote de trece locales destinados a oficinas en el número 7 de Travesía de Vigo. Su valor asciende a los 1,1 millones.
Cambio de bienes
Además de este incremento en el valor de los inmuebles a subasta, otro de los cambios de tendencia que se aprecian en estos procedimientos es el tipo de bienes. Y es que si lo habitual en años anteriores era encontrarse locales comerciales o incluso garajes, este año, el 90% de los lotes subastados se corresponden con viviendas, pisos o casas. Destaca también que solo el 30% de ellas se correspondían con un domicilio habitual, lo que facilita -y abarata- el proceso de puja.
