Esta semana un operativo policial permitía la detención de un joven que durante los últimos meses realizó tocamientos a mujeres que viajaban en trenes que hacían el trayecto entre Vigo y Pontevedra. Con un historial en el que ya le constan antecedentes penales por conductas de la misma naturaleza, lo cierto es que este tipo de delitos están al alza. Y buena prueba de ello es el último balance de criminalidad que acaba de publicar el Ministerio del Interior, que arroja que en la ciudad olívica, entre enero y septiembre de este año, hubo casi 70 casos de ataques sexuales, lo que supone una media de dos denuncias cada semana.
El ministerio concreta esta tipología de delitos en sus estadísticas desde 2016. Y la evolución desde entonces evidencia el notable aumento de casos. Durante los primeros tres trimestres de aquel ejercicio el número de ilícitos sexuales fue de 50. En el mismo período de este 2019 han sido 66, la cifra más alta en Vigo desde que Interior la detalla en sus registros: 11 fueron denuncias de agresiones con penetración y el resto, otra clase de delitos sexuales. En definitiva, el análisis de los datos evidencia que en solo tres años estos ataques aumentaron un 32%. Y lo que ocurre en la urbe olívica no es una excepción, ya que en el conjunto de la comunidad gallega el número de denuncias entre enero y septiembre ascendió a 495. El delegado del Gobierno en Galicia, Javier Losada, vincula este incremento con las políticas de concienciación para que las víctimas denuncien.
Junto al caso del joven al que ya se investiga judicialmente por abusar presuntamente de viajeras en el tren, otros asuntos destacados relacionados con Vigo de este año fueron el del sacerdote salesiano enviado a prisión provisional por supuestos abusos sexuales a menores de edad en un campamento de Cambados o el del chico al que se atribuyó una agresión sexual a una adolescente a la que conoció en las fiestas de Bouzas. Y aunque los hechos ocurrieron años atrás, fue en este 2019 cuando llegó el juicio y la condena a 36 años de prisión de Carlos V.I., "papuchi", el hostelero que protagonizó el mayor escándalo de delitos sexuales contra chicos menores en la ciudad.
Otras infracciones penales
¿Y cómo ha sido la evolución en Vigo del resto de infracciones penales? De forma genérica, contabilizando todos los delitos, en estos primeros nueve meses de 2019 hubo 7.862, lo que supone un incremento de casi un 10%. Aumentan casi todos los ilícitos. Junto a los ataques sexuales, crecen otras conductas violentas como las tentativas de homicidio o asesinato, al registrarse cinco casos -en este período de 2018 no hubo ninguno-. En cuanto a homicidios consumados, hubo uno, el crimen de un octogenario en Sárdoma a manos supuestamente de su hijo. Y se disparan un 34% las agresiones y riñas tumultuarias, al abrirse 82 casos.
En cuanto a los robos, hubo casi medio millar de asaltos en domicilios, establecimientos y otro tipo de instalaciones. Son un 10% más que en el ejercicio pasado, si bien, al hacer el análisis concreto de los robos en viviendas, un total de 218, se aprecia un descenso del 23%. Las sustracciones de vehículos y el tráfico de drogas también se disparan. Y las estafas, la mayoría por internet, están asimismo al alza.
Frente a estos incrementos, descienden ligeramente los hurtos (hubo 2.258). Y bajan de forma más evidente los robos con violencia e intimidación - tirones de bolsos o sustracciones en la calle a punta de navaja-: caen un 30% y se quedan en algo más de un centenar.
