Engalanada de blanco y arropada por cientos de feligreses, la imagen de la Virgen de Fátima salió ayer a recorrer las calles del barrio, como cada 13 de mayo. Una alfombra floral le rindió homenaje a su paso.

La parroquia de Fátima celebró la festividad de su patrona con once misas en horario extraordinario. La solemne fue la de las 19:30 horas, tras la que se celebró la tradicional procesión con la imagen de la Virgen y presidida por el obispo de la Diócesis Tui-Vigo, Luis Quinteiro Fiuza.

La marcha salió de la parroquia en Vía Norte y recorrió Travesía de Vigo y Urzáiz para regresar por la misma calle hacia la iglesia.

La de Fátima es año tras año una de las procesiones más multitudinarias de la ciudada y, en esta ocasión, además acompañó el buen tiempo.

Los vecinos de Vía Norte celebran visitas todos los años al santuario luso, ubicado en las colinas de Cova de Iría, donde está escrito que la Virgen se apareció en 1917 a los niños pastores Lucía, Jacinta y Francisco. Los tres jóvenes escucharon atentamente cómo les contaba que venía del cielo y les pidió que volvieran a los seis meses a ese mismo lugar. Juan Pablo los beatificó.