La noticia de la celebración un año más -y ya van 19- del festival de deporte urbano O Marisquiño recibió el aplauso unánime de todos los comerciantes, hosteleros, hoteleros y vecinos de la ciudad. Pero esta alegría vino acompañada de una recomendación. Y es que la continuación del evento en su emplazamiento habitual -el entorno de As Avenidas- motivó que las diferentes asociaciones insten el arreglo del paseo, pero no solo la zona afectada por el derrumbe del hormigón en la edición del año pasado durante un concierto, sino la "totalidad" del mismo. "Esto ya no debería de estar así ahora, hay que arreglarlo y arreglarlo bien", comenta Itos Domínguez, portavoz de los negocios del Casco Vello.
Lamentan que una de las zonas turísticas de la ciudad por excelencia cuente con este destrozo desde hace más de seis meses a la vez que emplazan a restaurar el paseo de madera restante. "Hay losetas rotas, otras levantadas... cuando es una zona que debería estar más protegida. Entendemos que es un tema legal y que nadie quiera tocar eso hasta que la jueza determine responsabilidades pero el tiempo pasa y la imagen de la ciudad se sigue dañando", sostiene César Ballesteros, presidente de los hosteleros de Pontevedra, quien aclara que "el deterioro comienza ya en A Laxe y no es por el tránsito de la gente, sino por el paso de camiones de gran tonelaje".
Precisamente, el presiente portuario Enrique López Veiga y el director de O Marsiquiño hablaron durante una de las reuniones mantenidas previa confirmación del evento de cubrir o tapar de alguna manera la zona hundida logrando una estética distinta durante los días del festival para no dañar la imagen del mismo, en caso de que se considerase necesario. "Con la cantidad de fotos aéreas que se hacen, saldrán todas con el boquete", lamenta una de las comerciantes.
Actualmente, y tras el oficio de la jueza instructora de la causa penal por un presunto delito de lesiones el pasado noviembre levantando el precinto judicial, la seguridad de la zona está en manos de la Autoridad Portuaria, quien optó por la colocación de un vallado y cámara de videovigilancia. Sobre el arreglo de la misma, López Veiga hace referencia a esta fase judicial. "Queremos ver cómo avanza la instrucción. No se ha tomado ninguna decisión por el momento ya que unos técnicos están haciendo una pericial de parte para este procedimiento. De momento va a seguir vallado y esto no impide para nada la celebración de O Marisquiño", matiza el presidente portuario.
Sobre el resto del paseo colindante al muelle hundido y una posible revisión de sus estructuras, López Veiga también fue muy explícito: "La conservación de la Zona de Abrir Vigo al Mar no le corresponde al Puerto, sino al Concello y no vamos a cambiar nuestra opinión. Siempre hemos dicho que O Marisquiño puede seguir aquí pero sí dejaremos explicitado la legislación que se aplique para no llevar a equívocos", precisa a mayores.
Imagen de la ciudad
Lo cierto es que los vecinos del entorno y negocios aledaños urgen el arreglo de toda la actuación para no dañar la imagen de la ciudad. "No está en su mejor estado, por eso pedimos por favor que lo arreglen cuanto antes. Es posible incluso tenerlo antes de los festivales de verano (en relación también al Vigo SeaFest, que se celebra en el mismo punto tan solo un mes antes)", apremia Pérez. El presidente de los holeteros de Vigo, Jaime Pereira se suma a esta demanda reconociendo que la maraña competencial del entorno dificultará la reforma. "Confío en que las administraciones implicadas puedan dar con una solución cuanto antes; son fechas en las que Vigo está casi lleno", afirma Pereira.
Por su parte el Concello vigués, hace alusión al citado oficio de la magistrada en el que encomienda al Puerto la tarea de garantizar la seguridad en la zona como estimase oportuno (bien con su derribo o con su reconstrucción al "no ser seguro para su uso").
