Vigo habrá perdido la oportunidad de pilotar el primer Campus de Formación Profesional pero la demanda de estudiantes que se decantan por este modelo educativo se afianza con prácticamente la totalidad de las plazas ofertadas ocupadas para este curso 2018/2019. Sus preferencias también ensalzan a determinados ciclos, donde las solicitudes duplican en muchos casos el cupo máximo de alumnado. Es el caso de los grados de Cuidados Auxiliares de enfermería, Gestión Administrativa, Instalaciones Eléctricas y Electromecánica de Vehículos, que centran casi la mitad de las matrículas solicitadas por los estudiantes de 1º curso del grado Medio, un total de 652.
A estos datos brutos, habría que incluir la matrícula del grado medio de Vídeo Disc-jockey y sonido y Sistemas Microinformáticos y Redes, ya que fueron los ciclos que tuvieron mayor número de demanda en relación con el número de plazas ofertadas, según Educación. En cuando al grado superior destacan Enseñanzas y Animación Sociodeportiva, Higiene Bucal, Anatomía Patológica y Transporte Marítimo. "En nuestro caso, fueron varios los ciclos donde se duplicó la solicitud a la demanda; hemos notado un incremento notable en la matrícula", reflexiona Rubén Otero, director del CIFP Manuel Antonio.
Enfermería es el módulo de estudios que más adeptos gana, con 280 solicitudes entre los cuatro periodos de admisión, ordinario y extraordinario. Esto supone que el 20% de los jóvenes que se han decantado por continuar sus estudios a través de la FP y no por una carrera universitaria quiere especializarse en cuidados auxiliares o atención a personas en situación de dependencia, dato que avala el gran tirón que tiene la rama sanitaria en la Formación Profesional. El montaje de infraestructuras de telecomunicación en edificios, el dominio de los fogones con los ciclos de Cocina y Gastronomía y Panadería y Repostería o los tradicionales oficios de Carpintería y Mueble y Soldadura y Calderería centran la oferta restante, una oferta que, un año más ha vuelto a cubrir las expectativas.
Y es que de las 3.407 plazas de grado medio y superior ofertadas en la ciudad este curso, se cubrieron 3.133 dejando tras de sí una tasa de ocupación del 92%, según datos de la Consellería de Educación. "Es un cifra muy buena, este año en concreto notamos una demanda muchísimo mayor, tan solo hay que ver en la aplicación la lista de excluidos en cada ciclo, especialmente en ramas sanitarias nos encontramos con listas de espera de hasta 250 alumnos", explica Manuel Arias, director del IES Ricardo Mella.
Formación Dual
¿Y qué motivó este aliento a la FP? El director del CIFP Manuel Antonio lo tiene claro. "La especialización de los ciclos y también del profesorado ha sido clave. Los módulos son cada vez más prácticos y enfocados a la materia en sí, más concretos y eso el alumnado lo valora porque lo que quiere es especializarse", señala Otero. Para fomentar esta inclusión laboral y adaptación a las carencias y necesidades del tejido industrial surgió la Formación Profesional Dual. En este curso, son seis los ciclos en los que se imparte esta modalidad: Gestión de Venta y Espacios Comerciales, Mecatrónica Industrial, Mantenimiento electromecánico, Fabricación de Productos Farmacéuticos, Soldadura y Automoción. La formación en las iniciativas de FP Dual es compartida entre el centro educativo y la empresa -que este año participan un total de 12-. Esta facilita sus instalaciones para realizar parcialmente determinados módulos profesionales.
Esta predilección por la Formación Profesional, que cada año va a más, augura también un aumento de las plazas ofertadas. "Los datos están ahí, pero no somos nosotros a quien nos compete esa decisión", explica Arias. La falta de espacio condicionaría este hipotético incremento de alumnos. "En nuestro caso lo veo complicado porque no podemos ampliarlo más, pero si se podrían reestructurar algunos módulos de Régimen Ordinario y de Adultos; hay algunos con poca demanda", sentencia Rubén Otero.
