Un total de 1.748 aspirantes se preparan para competir a partir de mañana en las pruebas teóricas de las oposiciones convocadas por el Cuerpo de la Guardia Civil.

En total se ofertan 2.030 plazas para incorporarse a la Escala de Cabos y Guardias. De ellas, 812 están destinadas a ocupar puestos militares profesionales de tropa y marinería de las Fuerzas Armadas, 175 son para los alumnos del Colegio de Guardias Jóvenes y las 1.043 restantes constituyen plazas libres.

La Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales es el escenario escogido para la realización de este proceso de selección.

Los candidatos tienen edades comprendidas entre los 18 y los 40 años. Deben poseer nacionalidad española y carecer de antecedentes penales, entre otras exigencias requeridas por el Cuerpo.

Esta fase de la oposición constará de tres pruebas: una de ortografía, otra de lengua extranjera y una última sobre el temario propuesto para la oposición. Los candidatos que no superen alguna de las pruebas establecidas serán excluidos del proceso de selección.

Además del examen teórico, los opositores también deben aprobar una serie de pruebas físicas, un test psicotécnico, una entrevista personal y un reconocimiento médico. Estos exámenes buscan garantizar que los aspirantes cumplen todos los requisitos exigidos.

La convocatoria llega poco después de que una opositora a psicóloga militar de Madrid denunciase de forma pública y a nivel estatal que había sido descalificada en el proceso por llevar un tatuaje de siete centímetros en su empeine derecho. El tribunal concluyó que si la aspirante llevase falda se le vería el dibujo, lo que contraviene la norma que prohíbe lucir tatuajes "que pudiera ser visibles vistiendo las diferentes modalidades de uniformes de las Fuerzas Armadas".

El Defensor del Pueblo se ha dirigido a Defensa para informarse sobre la exclusión de mujeres con tatuajes visibles con uniforme y ha pedido a la institución que se cuestiones si puede existir discriminación.