Miembros del Consejo de Administración del Puerto destacaron la "encendida discusión" surgida en la sesión de ayer entre López Veiga y el portavoz de la Cooperativa de Armadores (ARVI), Javier Touza, al abordar un punto del orden del día sobre la nueva ordenación de usos y actividades en O Berbés. En la rueda de prensa posterior, el presidente no mencionó el acalorado debate pero sí se reafirmó en su defensa de los cambios aplicados en el puerto pesquero. "O Berbés pedía a gritos un cambio de gestión", resaltó en referencia al nuevo modelo de funcionamiento que incluye el relevo de directivos de Praza da Estrela que hasta hace meses dirigían el departamento pesquero.

Entre otras razones que justifican la implantación de otro modelo, López Veiga apuntó el déficit que arrojan estas instalaciones, según el informe de contabilidad analítica, superior a los dos millones al año. Esta gruesa pérdida había sido uno de los motivos por los que el Puerto llegó a plantearse sacar este recinto en concesión con el objetivo de que lo administrasen los operadores, opción que ya descartó ante el desinterés de los colectivos y sobre todo el rechazo de estos a los cambios.

En todo caso Veiga avanzó que los cambios que se aplicarán desde este lunes "arrancarán con el máximo de prudencia". "Vamos a concentrar todos los esfuerzos en la obligatoria separación de espacios, en la primera y segunda venta, para luego prestar atención a otros aspectos", apuntó. Sobre el temor de algunos usuarios a que se produzcan embotellamientos a la entrada por las restricciones de acceso, rechaza esta posibilidad. "Se multará al que aparque mal pero no habrá colas", garantizó.