El primer carril bici que atravesará Vigo de punta a punta comenzará este mismo mes a pedalear con fuerza. La Concejalía de Fomento dirigida por David Regades tiene ya todo listo para aprobar en octubre un proyecto que revolucionará un eje de 10 kilómetros y que permitirá llegar en bicicleta desde Samil hasta Teis (y viceversa) a través del corazón de la ciudad. Tras meses de estudios y de un trabajo codo con codo con diferentes colectivos para su configuración, la inversión de 2,6 millones prevista inicialmente se elevará hasta los 5,7. Este incremento responde, según fuentes municipales, a la incorporación de varias propuestas de mejora recibidas y a la ejecución de reformas en calles y zonas por las que pasará la senda, como Venezuela, los volcanes de Coia o la plaza del Emigrante. Estos enclaves se humanizarán dentro del mismo plan para realizar obras solo una vez y permitir al mismo tiempo que el carril bici quede perfectamente integrado y adecuado para la convivencia de peatones, usuarios de la bicicleta y automóviles.
Este ambicioso proyecto -será el carril bici más largo de Vigo y el primero en el casco urbano- contará además, y según avanzan desde el gobierno local, con el apoyo económico de la Diputación de Pontevedra, con la que el Concello está ultimando un convenio para cofinanciar la obra a partes iguales. "El carril bici es el Vigo instaurándose en la modernidad. Ascensores, escaleras mecánicas, rampas, humanizaciones... es la calidad de vida en Vigo", destaca el alcalde, Abel Caballero.
La inversión en esta senda para bicicletas también se ha elevado por algunas mejoras planteadas por diversos colectivos (en su mayoría ciclistas), que propusieron que todo el carril bici transcurriera al nivel de la calzada para hacerlo más permeable. Y así será finalmente en la mayor parte del recorrido a excepción de en la avenida de Castelao o en el último tramo de Travesía de Vigo en sentido Buenos Aires, que estará a la misma cota que la acera.
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Vía verde
Otro de los planteamientos expuestos por diversas asociaciones que los técnicos han tenido en cuenta será la de incorporar ramales de conexión que permitan en un futuro rodar desde el carril bici hacia la proyectada y reclamada senda verde en la que se pide que se conviertan las viejas y abandonadas vías del tren entre Urzáiz y Chapela. Un desarrollo que, en todo caso, dependerá en primer lugar de que el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) apruebe la cesión de los terrenos de este antiguo trazado ferroviario. El Concello contempla dos accesos para bicicletas a través de Mestre Chané y Buenos Aires.
La Concejalía de Fomento prevé que su construcción pueda licitarse antes de que finalice el año y que las obras arranquen a principios de 2018. De hecho, el proyecto de la primera fase (Avenida de Europa) está ya adjudicado. Se trata del tramo que va desde Samil hasta el cruce con Tomás Paredes. Aquí contempla que el carril, de doble dirección, transcurra por el margen izquierdo en sentido centro y a la misma cota que el asfalto.
La siguiente fase con la que se le daría continuación (la fecha de ejecución de cada una de ellas está todavía sin determinar) iría desde los volcanes de Coia hasta la Plaza de América. Pese a que en este tramo existe ya un carril bici por el interior de los jardines, el Concello ha optado por otro recorrido. La senda actual dejará de existir y la nueva transcurrirá pegada al lado interior de la acera actual.
En el trayecto de la tercera fase, entre Camelias y el cruce de la calle Venezuela con Gran Vía, los ciclistas sí que rodarán ya en la mayor parte a la misa cota que los vehículos, siempre por el margen izquierdo en sentido centro. En Venezuela estaba previsto inicialmente que las bicicletas circularan a la misma altura que la acera, pero se aprovechará la humanización de todo el vial para revisarlo.
La senda atravesará Gran Vía y continuará en paralelo a El Corte Inglés para llegar hasta Pizarro, desde donde se contempla la cuarta fase que culminará en el cruce con Jenaro de la Fuente.
Coches y bicis comparten carril
Una vez en Travesía de Vigo se introducirá un modelo completamente nuevo con el que los ciclistas se integrarán de pleno con el resto de vehículos y se utilizarán ambos sentidos de circulación. Tanto en dirección ascendente como descendente el carril derecho de la calzada se constituirá como una ciclo vía que quedará limitada a 30 km/h (ahora está a 50 km/h) y donde los usuarios de la bicicleta tendrán prioridad. Rodarán de esta forma hasta y desde la rotonda del Centro Comercial Travesía. Desde allí hasta el cruce con Buenos Aires, la senda sí se ejecutará al mismo nivel que la acera, pero en este caso por el margen derecho. Se trata de la quinta fase con la que se culminarán estos primeros 10 kilómetros de carril bici y cuya apertura total está inicialmente prevista para 2019.
Otra de las medidas que no estaban previstas en el anteproyecto y que se incluirán a propuesta de los usuarios de la bicicleta (la asociación A Golpe de Pedal canalizó el grueso de los planteamientos) será la instalación a lo largo de todo el recorrido de "aparcabicis".
