Representantes de Os Ninguéns y la Rede de Solidariedade Popular protestaron ayer frente a la delegación de la Xunta para reclamar una profunda reforma de la Risga para que ayude de verdad a las 60.000 personas que no pueden cubrir hoy sus necesidades básicas. Los colectivos sociales reclaman más presupuesto para mejorar las prestaciones sociales, que se facilite la tramitación burocrática y que las unidades municipales de trabajo social trabajen de mañana y de tarde.