Un montaje gráfico que acompaña la información que divulga Heerema en su web busca llamar la atención sobre las dimensiones de su nuevo barco. La imagen recrea su grúa flotante junto a la silueta del London Eye, una comparativa en la que Sleipnir gana por goleada al alcanzar los 180 metros de alto frente a los 135 de la popular noria-mirador de la capital inglesa.

El Sleipnir forma parte de una nueva generación de buques semisumergibles para grúas. "Diseñado para el levantamiento pesado en alta mar en todo el mundo, estará equipado con dos grúas de 10.000 toneladas métricas de capacidad de elevación cada una y una superficie de cubierta reforzada de 220 metros de longitud y 102 metros de ancho", explica la compañía en su web. Estas dos plumas le "proporcionan la capacidad pesada de la elevación tanto para instalar y quitar chaquetas y topsides como para colocar cimentaciones, amarres y estructuras en aguas profundas", completa.

Sus cuatro motores de combustible dual le permiten llegar hasta los 10 nudos de velocidad. Dispone de helipuerto y otros servicios característicos en una plataforma petrolífera, pero destaca su elevada capacidad de alojamiento, de hasta 400 tripulantes en cabinas sencillas y dobles, todas con calefacción y aire acondicionado.