El Juzgado de Instrucción 1 de Vigo dictó un auto en el que ratifica la decisión adoptada en julio de acordar la apertura de un procedimiento separado contra el concejal socialista Ángel Rivas por su participación como edil en juntas de gobierno en las que se aprobó adjudicar obras a empresas a las que suministraba hormigón la firma Hormigones Val Miñor de la que él fue gerente. La magistrada desestima así el recurso de reforma de la defensa del concejal en el que se instaba el archivo de la causa, si bien el auto no es firme ya que aún cabe apelar ante la Audiencia Provincial de Pontevedra.
La magistrada estima que, sin perjuicio de que la investigación aún no concluyó, existen "suficientes indicios de criminalidad" contra Rivas, y señala que su actuación podría ser constitutiva "o bien de delito de prevaricación o bien de delito de negociaciones prohibidas a funcionarios". Así, entre otros argumentos, considera que la participación del edil en juntas en las que fueron adjudicatarias de obra pública empresas a las que la firma de la que paralelamente era gerente suministraba hormigón supondría "un verdadero aprovechamiento por su parte", al verse favorecida Hormigones. "Son los intereses comerciales, el volumen de negocio de la entidad, en la que tiene interés directo, era su gerente, los que se ven favorecidos", dice. Por otra parte, la juez acepta la acusación popular de Xuntos pero le exige el pago de 3.000 euros en metálico.
