El 10 de agosto cumple 65 años. Ese día, tras más de cuatro décadas en el cuerpo, los últimos 13 meses como comisario principal de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Vigo-Redondela, José Muñoz Lozano deja el cargo por su jubilación. Regresa a Cataluña, de donde es originario, aunque seguirá visitando Galicia. Se va con un balance positivo de su estancia en la urbe. "Vigo goza de buena salud en materia de seguridad", asevera, haciendo énfasis en que se redujo la criminalidad y en el "alto" nivel de eficacia policial. "Casi el 60% de los delitos graves y menos graves se resuelven; es muchísimo", asegura, señalando que se aprecia cierto nivel de delincuencia itinerante, pero que hubo varios golpes "vitales" contra bandas dedicadas a robos en viviendas, que cuando vienen de fuera suelen usar modus operandi "inéditos".
Consciente de que "en un año" no da tiempo a desarrollar "todo un proyecto de trabajo", destaca que a su llegada existían y se han mantenido "índices de seguridad razonables". Valora la plantilla de Policía Nacional "entregada" de Vigo y el "gran nivel de colaboración" con Policía Local y Guardia Civil. Y suma en esta cooperación a los profesionales "de seguridad privada" , así como la "colaboración ciudadana".
Los servicios policiales se "incrementarán con el tiempo" porque "las necesidades emergentes lo exigen". "No porque haya problemas; la estructura es adecuada y las unidades funcionan de forma autónoma", describe. Recientemente una decena de agentes, afirma Muñoz, reforzaron los servicios de atención al ciudadano, los radiopatrullas.
En su primer año en Vigo, 2015, hubo tres crímenes de violencia machista. En lo que va de 2016 subieron un 3% los delitos de maltrato, "pero el lado positivo es que no hubo ningún fallecimiento". El asunto más grave este año, caso que califica de "raro", fue el del portugués millonario que intentó matar a su pareja en un hotel.
Mientras, bajaron los delitos sexuales y hubo un "retroceso" en casos de sexting y pornografía infantil en internet. De los casos que destaca, un velero con 540 kilos de cocaína, un coche con 105 de hachís o el proceso por fraude a los hermanos Hermida.
