El Concello hará hucha con la venta de los pisos y parcelas para incorporar el dinero al Patrimonio Municipal do Solo y destinarlo a actuaciones urbanísticas que promueva o en las que participe.
La ley permite destinar los ingresos en metálico que obtenga el Concello por estas ventas a la construcción de viviendas de protección, al pago de terrenos destinados a dotaciones públicas, a la conservación y mejora del medio ambiente y el patrimonio cultural, y a la creación de suelo para actividades empresariales.
El gobierno local destinó 2,6 millones de los más de tres recaudados hasta ahora con la venta de 25 pisos en Rosalía al pago de las expropiaciones para la Ciudad de la Justicia. El Concello ya es dueño de los terrenos tras abonar el importe a los afectados en noviembre, y tras el nuevo planteamiento de la Xunta de trasladar el complejo judicial al Xeral, el alcalde propone que el Ministerio de Cultura edifique allí la Biblioteca Pública del Estado.
Con los ingresos por las ventas que materialice el Ayuntamiento puede disponer de los fondos para nuevas actuaciones públicas, si bien está condicionado por la anulación del Plan Xeral. Este incluía dotaciones como la milla verde de Coia, para la que la Gerencia de Urbanismo negociaba ya con los propietarios afectados y existían distintas posibilidades de resarcirlos. El proceso quedó paralizado por la sentencia del Supremo que tumbó el PXOM.
