El Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de Galicia transmitió ayer su pésame a la familia del fallecido e insistió en la importancia del "mantenimiento periódico preventivo" de las instalaciones de gas y que éstas estén "homologadas" por "profesionales" para "minimizar" los riesgos de explosiones como la ocurrida esta semana.

La investigación de la Policía Nacional tiene como principal tesis la de un accidente en la muerte de Ramón González Sanz. Nada indica lo contrario. Había una "gran bolsa" de gas, lo que apunta a que la fuga, de una de las tres bombonas que había en la vivienda, llevaba activa tiempo. Y la ventilación no era suficiente. Todo hace presuponer que el siniestro ocurrió cuando la víctima se levantó, al encender el calentador o algún interruptor. "Fue un cúmulo de circunstancias nefastas", valoran.