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Medidas para reducir los accidentes de tráfico

Vigo ensayará en Gran Vía la primera "turboglorieta" para reducir los choques en las rotondas

Este modelo de rotonda impide los cambios de carril en su interior, que son la segunda causa de accidente en Vigo tras las distracciones -Los técnicos municipales ultiman su diseño para probarla en el cruce de Islas Baleares

| Si los resultados de la "turboglorieta" en el cruce de Gran Vía con Islas Baleares son exitosos, probablemente este modelo será válido en cualquier otro punto de la ciudad. Y es que se trata de una de las rotondas con mayor intensidad de tráfico de Vigo. En sentido hacia la Plaza de España la atraviesan a diario una media de 27.648 vehículos; y hacia Traviesas lo hacen más de 16.000.

Los cambios de carril en las rotondas se han convertido en un auténtico rompedero de cabeza para los conductores y los técnicos de la Concejalía de Tráfico. Y es que el mal uso de las glorietas se sitúa ya como la segunda causa de accidente en Vigo solo después de las distracciones. Y, aunque se han convertido en un elemento indispensable para agilizar el tráfico e incrementar la seguridad, prácticamente todos los días se registra un golpe en alguna de ellas, la mayoría de chapa y pintura. Y el Concello ya se ha puesto manos a la obra para tratar de disminuirlos. Lo hará testando la primera "turboglorieta" en uno de los cruces con mayor densidad de tráfico y siniestralidad de la ciudad: el de Gran Vía con la calle Islas Baleares. En las próximas semanas se crearán aquí este novedoso modelo que funciona ya con éxito en países como Holanda o Reino Unido y que se está también probando con éxito en comunidades españolas como Asturias o Cantabria.

Las conocidas como "turborotondas" cuentan con la ventaja de que su configuración impide que los conductores realicen cambios de carril una vez que están en su interior. Y precisamente es esto lo que desencadena el mayor número de accidentes. El más común se produce cuando un piloto que circula por el carril interior invade el de su derecha para abandonar la glorieta golpeando al vehículo que circula por él. Esta maniobra es prácticamente imposible realizarla dentro de una "turboglorieta", ya que el predominio de líneas continuas obliga a los conductores a permanecer en todo momento en el carril por el que han entrado y que les llevará casi de forma automática hacia su salida sin necesidad de maniobras arriesgadas.

Pero este tipo de glorietas exigen un cambio de mentalidad. No vale llegar por cualquier carril a ellas. Los conductores deberán posicionarse en uno u otro en función de la salida que vayan a tomar luego. Para ello, los técnicos de tráfico colocarán tanto señales verticales como horizontales en la calzada para que los pilotos conozcan sus alternativas antes de entrar a la rotonda. También se harán campañas informativas previas.

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En este caso en particular, los pilotos que desciendan por Gran Vía hacia Plaza de América por el carril derecho solo podrán continuar de frente utilizando el anillo exterior. Los que entren por el lado izquierdo también podrán seguir hacia Traviesas por el interior o realizar un cambio de sentido sin invadir en ningún momento el otro carril, ya que el propio diseño de la glorieta ya los "expulsará" hacia su destino (ver gráfico).

Algo similar ocurrirá en sentido inverso, desde Plaza de América a España. En este caso hay tres carriles. Los pilotos que lleguen por los dos más próximos a la acera podrán solo seguir de frente. Los que quieran realizar un cambio de sentido, tendrán que acceder a ella por el del interior, desde el que también tendrán la posibilidad de continuar hacia Plaza de España.

La intersección de la calle Islas Baleares continuará regulada con semáforo, por lo que el acceso a la rotonda no tendrá ninguna complicación añadida. Tráfico prevé también instalar un semáforo en el acceso a la rotonda desde la calle por la que se sale de la empresa de lavado de coches ubicada en este punto.

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