El departamento municipal de Urbanismo deberá cambiar el procedimiento que efectuaba hasta ahora para el cumplimiento de la ley que obliga a realizar la inspección técnica de edificios en la ciudad.
El Tribunal Gallego de la Competencia ha dictado una resolución por la que deja sin efecto el acuerdo que el Concello mantenía con los colegios oficiales de Arquitectos y de Aparejadores para el citado procedimiento de inspección.
La resolución del tribunal considera que el proceso seguido hasta ahora, por el que ambos colegios eran los que canalizaban los expedientes de las inspecciones a los inmuebles, no se ajusta a la normativa en vigor.
Urbanismo, por su parte, considera que la resolución no plantea más problemas que los resultantes de variar el procedimiento. "Cuando el año pasado comenzamos con la inspección de los edificios, ya dejamos pendiente la firma del convenio con arquitectos y aparejadores, en espera del informe del Tribunal de la Competencia, por lo que el convenio no se llegó a firmar", explicó el gerente de Urbanismo, Javier Rivas.
No obstante, en la práctica se ha venido funcionando así desde 2006, cuando se inspeccionaron, de forma obligatoria, unos 4.000 inmuebles cuya construcción databa de antes del año 1910, la mayoría en el caso antiguo de la ciudad.
Para el presente año están pendientes otros tantos edificios, levantados entre los años 1910 y 1940, que habrán de pasar también la inspección a la que obliga la legislación en vigor.
