El secretario xeral de los socialistas gallegos, Gonzalo Caballero, denuncia cierres de oficinas bancarias en pueblos pequeños “cada semana”, lo que supone “una puñalada a los derechos” de los gallegos “que viven en el rural”. Frente a esta situación, que supone un “retroceso de derechos que no podemos consentir”, reclamó ayer al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, medidas para “evitar la exclusión financiera en los concellos pequeños” y para “garantizar la igualdad de oportunidades” de los ciudadanos en estos municipios.
Así lo defendió en un encuentro con una catorce alcaides –como los de Forcarei, Dumbría, Vimianzo o A Baña– y portavoces socialistas de concellos afectados por la clausura de oficinas bancarias. Caballero demandó a la Xunta en concreto soluciones para “paralizar” la desaparición de oficinas y para materializar esa “apuesta por el rural” de la que tanto habla mediante una “discriminación positiva” de los ayuntamientos con menos vecinos. “Es un avance poner un cajero”, concedió, donde no lo había, pero recuerda que la Fegamp “pide que la Xunta garantice servicios análogos a los que había”.
