Hace siete años, la Xunta avanzó que, al hilo de la Lei de Fomento da Investigación e Innovación de Galicia, se constituiría un observatorio centrado en la I+D+I para potenciar el avance científico y tecnológico que debería impulsar el crecimiento económico de la comunidad. Ese instrumento para radiografiar en concreto el estado de ese campo en la eurorregión Galicia-Norte de Portugal y las oportunidades futuras echará a andar este año.

La Axencia Galega de Innovación (Gain) ha licitado por 92.000 euros el contrato para poner en marcha ese observatorio, “que posibilitará recopilar información actualizada en materia de innovación” en esta eurorregión en un momento de suma importancia, debido a la crisis socioeconómica sin precedentes que ha generado la pandemia de Covid-19.

La administración pretende poner en marcha “un servicio de consultoría especializada en materia de análisis funcional de las capacidades de innovación” de su alianza con Portugal y tener bajo control la implantación de la estrategia RIS3T, de especialización inteligente, una vía para captar financiación europea mediante la modernización del tejido productivo.

El nuevo observatorio estará activo “en breve”, según fuentes de la Consellería de Economía, pues el contrato para ponerlo en marcha concluirá el 31 de diciembre. Su misión es establecer una plataforma de información que permita “gestionar y ofrecer periódicamente información sobre el nivel de desarrollo de la innovación en Galicia norte de Portugal”, según el pliego, además de eventos formativos y acciones mediáticas para poner en valor esas iniciativas.

En este sentido, la información que genere servirá “de elemento para la definición de políticas públicas en materia de innovación”, crucial en el momento actual, en el que la Unión Europa pretende inyectar cientos de miles de millones de euros a proyectos innovadores para tratar de paliar los efectos de la recesión vinculada al SARS-CoV-2. Por eso, uno de los puntos clave del proyecto pasa por detectar “la tendencia y los posibles problemas que afecten a la extensión de la innovación” en la eurorregión.

Para ello, deberá identificar un “mapa funcional de los stakeholders” en la zona para aclarar el potencial crecimiento de la innovación en cada ámbito, como la automoción, el turismo o el naval, por ejemplo. Con stakeholders se refiere a las partes implicadas en un proceso que favorecen una sinergia positiva, como empleados, proveedores, clientes, administración, alianzas empresariales del tipo clústers...

El proyecto contará con 200 encuestas y 8 entrevistas en profundidad a actores claves de la eurorregión en empresas, clústers, universidades, administración o centros tecnológicos.