La CiUG publicaba ayer su octavo listado de admitidos y espera para ocupar una plaza de nuevo ingreso en los campus gallegos. Todavía quedaría una oportunidad más para dar por cerrado el período oficial de admisión para los alumnos que llegan de la ABAU de septiembre y la Xunta aspira a que el balance de inscritos llegue a cubrir el 93 por ciento de los puestos ofertados en primero en las facultades gallegas, lo que supondría un "récord" de cobertura histórico y tendría más mérito en tiempos de pandemia, como defendió ayer en una comparecencia en el Parlamento el secretario xeral de Universidades, José Alberto Díez de Castro.
El responsable de Universidades gallego proclamó que el curso en los campus ha arrancado de manera "relativamente tranquila" y aseguró que lo corroboran los niveles de matrícula. Señaló que el último dato de inscripciones suponía un 92% de cobertura de las plazas ofertadas por la CiUG para estrenar grado en el sistema universitario gallego y que en los dos llamamientos que quedan (incluyendo el de ayer), es "verosímil" el poder alcanzar el 93%. "Si se confirmase sería el récord de cobertura de cualquier año de las plazas ofertadas en el SUG, lo que es una buena noticia para la universidad y para el alumnado", señaló.
Además, este hecho se produciría en un contexto que se barajó como poco propicio para conseguirlo, según indicó después. "En los primeros momentos se hablaba de que muchísima gente podría dejar la universidad por problemas de todo tipo, tecnológicos, económicos, y creo que la política de tasas entre otras fue una de las claves" para que los niveles de matrícula de este curso estén "no solo a nivel de siempre", sostuvo, sino a que puedan aspirar a ser los más elevados.
En esa línea, recordó también la política de precios de máster, equiparados ahora en Galicia al grado, para evitar que "alguien se quede fuera" por la pandemia. "Eso facilita muchísimo" la transición de grado al máster, señaló, que sería un requisito "indispensable" para iniciar una carrera investigadora.
En la oferta de plazas que publica la CiUG para cubrir en la preinscripción extraordinaria figuran puestos disponibles en 45 carreras, sin incluir aquellas que constan con cuota para personas con discapacidad o de deportistas de alto nivel. En total, unas 870 plazas, frente a las 11.483 ofertadas, 143 más que un año antes. Hay que tener en cuenta que este año el SUG estrenaba tres nuevos grados y los tres primeros abiertos, con lo que busca combatir el abandono de las aulas.
Díez de Castro destacó cómo las universidades trabajaron "bien y rápido" ante una situación "inesperada y sin precedentes", la pandemia. Pero también reconoció que esta sirvió de impulso en una faceta en la que la enseñanza superior en Galicia "tenía alguna demora": las "aplicaciones tecnológicas". A su juicio, el coronavirus permitió "acelerar el paso", pero se dio un paso "pequeño". Así, indicó, frente a la docencia "híbrida", solo se puede hablar sobre todo de "docencia presencial remota".
El virus en las escuelas
En los niveles preuniversitarios la pandemia también está presente. Ayer el conselleiro de Educación, Román Rodríguez, y el de Sanidade, Julio García, visitaban el covid auto para la comunidad educativa de A Coruña y la Xunta hacía balance de las pruebas realizadas al personal de centros y alumnos en estas instalaciones: ya son más de dos mil. En ese foro, el conselleiro de Educación reivindicó las aulas como "espacios seguros", aunque apeló a la "prudencia". Rodríguez aseguró que las aulas son "lugares que funcionan como cortafuegos". "De identificación y ruptura de la cadena de transmisión", explicó, recalcando que "en la mayoría de los casos" se trata de contagios producidos fuera del entorno escolar.
Otro efecto de la pandemia es que haya alumnos de Bachillerato y FP con clase por la tarde por desdobles. Los socialistas explican que trasladaron una proposición no de ley en la Cámara para "garantizar" en toda Galicia el transporte para esos alumnos, que antes recurrían al que utilizaban sus compañeros de ESO, que fue rechazada por el PP.
