"Los PDF enviados por los profesores durante el confinamiento no estaban adaptados para el alumnado con dislexia y/o otras DEA, ni en forma, ni en el tiempo que tenía el alumnado para realizarlos. Los padres hemos tenido,una vez más, que hacer de profesores, de PT, de AL, adaptando, explicando, leyendo, dictando, corrigiendo... Es evidente que no todas las alumnas y alumnos con dislexia tienen las mismas facilidades a nivel del acceso a las TIC y sus madres y padres tampoco". Así lo explica la presidenta de la Asociación Galega de Dislexia (Agadix), Esther López, que pide que se revise la situación de cada alumno para poder adaptar el ritmo de este "atípico" curso.

Hoy se celebra el Día Europeo de la Dislexia. En Galicia, la estadística de la Administración autonómica apunta que son 13.892 los alumnos con dificultades específicas de aprendizaje, entre los que se incluyen alumnos con dislexia. De esta cantidad, 8.023 son de Educación Infantil y Primaria y 5.869 de Secundaria (en este caso -ESO- son 106 alumnos más que en el curso 2018-2019, un dato que la Consellería de Educación apunta que puede ser debido al proceso de identificaciones tras la publicación a principios de este año del 'Protocolo para a intervención psicoeducativa da dislexia e/ou outras dificultades específicas da aprendizaxe').

La etapa de la escuela en casa con el tema del confinamiento supuso un problema para el alumnado con dificultades específicas de aprendizaje. "La brecha tecnológica y social no ha ayudado tampoco, una vez más, a este alumnado. No se puede, en nuestra opinión, seguir permitiendo subir tareas generales a plataformas online sin individualizar, ni colgar de forma indiscriminada en las aulas virtuales tareas sin adaptaciones, teniendo en cuenta que los padres no somos expertos en cómo hacerlo", describe Esther López Carbajales. Apunta que el profesorado especialista podría ayudar en esta tarea si se potencia el uso de herramientas digitales para trabajar con este alumnado de forma online, si fuese necesario o se diera el caso.

Las familias consideran fundamental y así se lo han trasladado a la administración a través de Agadix que "más que nunca, ante el nuevo curso escolar, se realicen evaluaciones psicopedagógicas precoces para conocer cuáles son las habilidades cognitivas más alteradas en cada alumno/a con DEA". "De este modo se podrá estructurar un plan de atención individual y determinar cuáles son las necesidades educativas que tiene cada uno, lo que favorecerá el proceso de aprendizaje del alumnado con DEA y el proceso de enseñanza de cada docente", expresan desde Agadix. Aseguran tener conocimiento de que "siguen sin realizarse de forma habitual y que, en ocasiones, se hacen tan solo cuando la familia las solicita por escrito, lo que no nos parece muy lógico".

Seguimiento personalizado

"En este momento de emergencia sanitaria, en el que el alumnado no puede tener un seguimiento tan personalizado, se hace aún más urgente realizar evaluaciones para evitar el progresivo distanciamiento académico de este alumnado con el resto de sus compañeros", apunta López Carbajales.

Indican desde Agadix que los equipos de orientación deben informar a cada uno de los docentes que trabajan con este alumnado de sus necesidades específicas de apoyo educativo, "instándoles a revisar los protocolos existentes para realizar de forma individualizada el plan de intervención con las medidas ordinarias que se deben adoptar". "Insistimos en que las medidas ordinarias dentro del aula son las que más compensan las dificultades de este alumnado. Seguimos pensando que siempre es mejor un docente de apoyo o un profesor especialista dentro del aula ordinaria que no segregar al alumnado con NEAE (necesidades específicas de apoyo educativo) a otra aula, separándolos de su grupo de iguales que, estamos seguros, potencia la no inclusión y la estigmatización, con consecuencias en el rendimiento, actitudes y estado emocional de este alumnado", concluye.