Un piso de cien metros cuadrados cuesta en la calle General Pardiñas de Santiago 355.000 euros y en el barrio de As Gándaras-A Milagrosa-Lamas de Prado en Lugo, 88.000. La diferencia entre los precios extremos registrados en puntos de la comunidad puede parecer enorme. Es una brecha de 2.670 euros por metro cuadrado. Sin embargo, es una de las diferencias más pequeñas registradas en el conjunto de España.

Solo Extremadura (1.540 euros) y La Rioja (2.210), además de las ciudades autónomas de Ceuta (2.375) y Melilla (2.050) tienen menores diferenciales entre precios máximos y mínimos dentro de sus grandes ciudades, según señala el estudio elaborado por la sociedad independiente Técnicos en Tasación (Tecnitasa) con datos al cierre de enero de 2020. Las mayores diferencias se dan en Cataluña (9.300 euros), Madrid (9.075 euros) y País Vasco (6.642 euros).

En las ciudades gallegas el precio máximo del metro cuadrado se localiza en Santiago; en concreto en la zona centro de Compostela (calle General Pardiñas), donde la superficie de la vivienda tipo alcanza los 150 metros y se abonan 3.550 euros por metro cuadrado. En esta misma localidad, el rango más bajo se encuentra en la zona residencial del Polígono de Vite, donde los compradores ven reducido a 960 euros el precio de la unidad de superficie.

En Vigo, los pisos más caros, a 3.200 euros metro cuadrado, se sitúan en la zona de Montero Ríos, Compostela, Marqués de Valladares y Colón. Los más baratos, de 1.250 euros el metro, en Travesía de Vigo, Buenos Aires, Ramón Nieto, Avenida de Galicia y Coia.

En Pontevedra y Ourense, el centro se paga a 2.130 y 3.350 euros respectivamente; y las zonas más alejadas, a 1.135 euros (Medico Ballina, Leandro del Río y Carnota, en Pontevedra) y 1.085 euros la unidad de superficie (Santa Teresita, en Ourense).

En la comparativa interanual, entre 2019 y 2020, Vigo es la ciudad donde más han aumentado los precios -200 euros el metro cuadrado- en las zonas más caras. Le siguen Lugo y Ourense, donde las áreas más céntricas se pagan ahora a cincuenta euros más; A Coruña y Pontevedra, con 50 euros de subida y, por último Santiago, donde en un año los precios en las zonas más inasequibles avanzaron unos 45 euros.