La Consellería de Educación busca impulsar la FP dual, en la que se combina el aprendizaje en un centro de formación con prácticas en empresas. A pesar de su elevada inserción laboral, en algunos ciclos no se cubren la totalidad de las plazas. Su implantación, ya muy extendida en países como Francia o Alemania, es más lenta en España y la Xunta quiere potenciar esta modalidad formativa y elevar en un 40 por ciento la matrícula. Para ello ha lanzado un Plan de Dinamización, con una inversión de casi 5 millones de euros, que incluye novedades como la supresión del límite de edad para cursar esos ciclos, que hasta ahora se situaba en los 29 años. Además se darán ayudas de hasta 1.500 euros para financiar los desplazamientos de los estudiantes hasta la empresa en la que realice las prácticas.

Son medidas con las que pretenden hacer más atractiva la FP dual, que en la actualidad cursan 1.069 alumnos en 42 centros educativos. Se ofertan un total de 127 ciclos en 66 titulaciones diferentes.

Hasta ahora la matrícula estaba abierta solo para menores de 29 años, pero la Xunta ha optado por suprimir este límite pensando en aquellos gallegos que están trabajando y superan el tope de edad pero pueden estar interesados en mejorar su formación apuntándose a la FP dual. También se facilitará que el alumnado de ciclos formativos tenga acceso directo al 2º curso de esta modalidad que combina los estudios con prácticas en empresas.

Otro freno a la expansión de la FP dual estaba en el coste de los desplazamientos hasta las empresas en las que se realiza el aprendizaje y que, en ocasiones, obliga a los alumnos a trasladarse fuera de su concello de residencia. Esto además corría a cargo del bolsillo de los estudiantes que, en ocasiones, preferían renunciar a las prácticas. La Consellería de Educación sufragará ahora el transporte con ayudas que oscilarán entre los 200 y los 1.500 euros, según la distancia a la que se encuentre el centro de trabajo.

Pero además se buscará una mayor implicación del tejido empresarial con la FP dual. Para ello la Xunta designará a 47 centros como "dinamizadores" y en cada uno de ellos habrá una persona responsable que se dedicará a tiempo completo a sondear a empresas interesadas, difundir el funcionamiento de esta modalidad formativa, conocer los perfiles profesionales que más se demandan y servir de enlace entre los alumnos y los centros de trabajo. "Se fomentará la colaboración con todo tipo de empresas, independientemente de su tamaño y dimensión, con asociaciones empresariales, instituciones y organizaciones sin ánimo de lucro y, especialmente, con las empresas punteras en sectores estratégicos gallegos", destaca Educación.

Y como incentivo la Xunta crea unos premios en reconocimiento del compromiso y la implicación del tejido empresarial gallego. Habrá distintas categorías: galardones para los tutores, para las pequeñas y medianas empresas, para las grandes y para las organizaciones empresariales.

De cara al próximo curso 2019-2020 se convocará una convocatoria específica de movilidad tanto para el profesorado como para el alumnado de FP dual con estancias en centros de fuera de la comunidad autónoma, lo que "les permitirá mejorar su cualificación, tanto en el campo de las competencias técnicas como lingüísticas, sobre todo respecto al lenguaje técnico de cada profesión".

Según los datos de la Xunta, nueve de cada diez alumnos que cursan FP dual consiguen un trabajo al terminar su formación, por encima de la inserción de la Formación Profesional, que se sitúa en el 85 por ciento.