Galicia rechaza la propuesta del Gobierno central para elevar el tope de déficit permitido a las comunidades el año que viene, que pasaría del 0,1% al 0,3%, que le permitiría disponer de un endeudamiento autorizado extra de alrededor de 130 millones de euros. El Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) aprobó hoy, por segunda vez, ese nuevo objetivo de estabilidad para las autonomías en el próximo trienio que ya aprobó a mediados de julio. En 2020 el tope será el 0,1% y en 2021 se alcanzará el equilibrio fiscal.

La reunión celebrada hoy de forma telemática se solventó con la única novedad de la Comunidad Valenciana, que pasó de la abstención al voto favorable. El Gobierno volvió a recibir el apoyo de siete comunidades socialistas y Cantabria y el rechazado de las gobernadas por el PP.

Esta senda de estabilidad, sin embargo, fue rechazada por el Congreso, que también tumbó un nuevo techo de gasto que variaba las cuentas aprobadas por el PP, desalojado del Ejecutivo en junio. Este marco presupuestario es imprescindible para que las comunidades aprueben sus respectivos techos de gasto y, por tanto, sus presupuestos para 2019.

La Xunta reiteró antes de conocerse el resultado de la votación su oposición a la medida que permitiría a las comunidades optar a 2.500 millones de euros adicionales endeudándose, pues la medida "solo anticipa futuras subidas de impuestos" y contrasta con un escenario de "fuerte recuperación económica", según expuso en un comunicado la Consellería de Facenda.

Este departamento reclamó a Hacienda que agilice su promesa de ceder a las comunidades la mensualidad de su cuota del IVA del año pasado retenida por un problema técnico derivado de la reforma aprobada por el anterior Ejecutivo de PP. A Galicia le corresponden 198 millones.

Por su parte, PSdeG y BNG criticaron la postura de la Xunta. Para el líder socialista, Gonzalo Caballero, relajar el límite de déficit permitiría "que el crecimiento económico llegue a las familias y a la ciudadanía con mayor fluidez" y posibilitaría "que el conjunto de las Comunidades autónomas disponga de 2.500 millones de euros más en los presupuestos del año 2019". También vinculó la negativa de la Xunta a la "estrategia de confrontación electoral del PP".

Por su parte, la nacionalista Ana Pontón afeó a la Xunta defender solo "consignas del PP" en lugar del interés general de los gallegos.