El próximo curso serán 13 escuelas unitarias menos en la comunidad gallega: 4 en Pontevedra, 8 en A Coruña y 1 en Lugo. La Consellería de Educación anunció que cerrarán por falta de alumnos: se necesitan seis niños para mantener un centro de este tipo, en el que convive alumnado de varias edades. Con menos niños la Xunta las considera "inviables", por lo que opta por cerrarlas. El alumnado se reubica en los colegios más próximos. La curva demográfica no ayuda, para nada, a la supervivencia de este tipo de colegios con poco alumnado, muy comunes en la comunidad gallega por el tipo de estructura poblacional dispersa. En el último lustro cerraron cerca de 60 en la comunidad.

Para el próximo año dejarán de funcionar en Pontevedra la EEI de Moreira en Gondomar ( con 5 alumnos), la EEI do Sartal en Poio (3 alumnos), la EEI de Xustáns en Pontecaldelas (5 alumnos) y la EEI de Pontellas en O Porriño (con 5 alumnos). La provincia que más unitarias perderá será A Coruña, que tendrá ocho menos: desde la EEI de Xaviña, en Camariñas, (con solo 3 alumnos), hasta el CEIP de Boebre, en Pontedeume, hasta la EEI de Sorribas, en Rois (con solo 3). En Lugo, cerrará el CEP de Castelao, de Vilalba. "En este caso el cierre responde a una decisión de las propias familias, ya que todas ellas (un total de 14) optaron por matricular a sus hijos en otros centros", según Educación.

Además de las unitarias, la Xunta también presentó ayer el cierre y apertura de unidades, según el número de alumnos por cursos. En Pontevedra se eliminaron 20, en A Coruña 17, 7 en Ourense y 4 en Lu go. Además, se crearon y habilitaron otras unidades en los colegios, 66 en total. En el cómputo de cierres y aperturas, son 18 más para el próximo curso. Se trata de un proceso de reorganización de unidades que Educación lleva a cabo "año tras año" dentro de los propios centros educativos. La Xunta apunta que se trata de "realizar una gestión eficiente de los recursos educativos".

La falta de niños es la principal causa, de hecho, el cierre ha sido continuo en los últimos años. Por ejemplo, en 2006 se cerraron 27 unitarias. Si se pone el foco sobre la última década, la cifra de unitarias cerradas en la comunidad gallega se acerca a 200.

La solución es distinta para cada escuela. En el caso de la de Mañufe, parte de las familias afectadas se negaban al cierre de la escuela, de hecho, en el mes de abril, mostraron su rechazo públicamente. A este centro asistían diez niños de entre 3 y 5 años pero antes de terminar el curso la previsión indicaba que quedarían muy pocos, ya que siete abandonaban el pequeño colegio. En casos como este, Educación propone la opción de matricular a los pequeños en cualquier colegio del municipio y habilitar líneas de autobús. Lo padres aseguraban estar encantados con el funcionamiento de la escuela de Moreira: "con unas instalaciones estupendas y en un entorno muy próximo para ellos".

"Imposible conseguir niños"

En la EEI de Pontellas en O Porriño intentaron conseguir más niños, es decir, que algunos padres se animaran a inscribir a sus pequeños en la unitaria para llegar por lo menos a seis y evitar el cierre de la misma. "No fue posible, se habló con varios padres, pero algunos ya tienen a sus hijos en otros colegios y prefieren que los pequeños vayan con los mayores. No pudimos conseguir el mínimo y la escuela tiene que cerrar. Es una escuela relativamente nueva, además, no es de las más antiguas", apuntaron ayer fuentes del concello pontevedrés de O Porriño.

Con datos de Educación sobre el histórico de unitarias y Centros de Educación Infantil y Primaria (CEIPs) cerrados, en un cómputo conjunto, en 2005 se perdieron, por ejemplo, 10 centros en total, y en 2009, 23. Son cifras elevadas, con cierres continuos cada ejercicio, que dan una idea de la pérdida de niños, sobre todo en las áreas rurales. Galicia perdió el año pasado 12.269 habitantes al incrementarse las defunciones un 5,9% y continuar a la baja el número de nacimientos. En 2015 el número de alumbramientos se situó en los 19.412, la cifra más baja de los últimos trece años. Excepto en 2008, con un ligero incremento de los nacimientos, la caída es continua.